Crítica:

La gitana y el caballero

The gypsy and the gentleman, 1957 (107 minutos). Director: Joseph Losey. Intérpretes: Melina Mercuri, Keíth Mitchell.Sir Paul Deverill es un noble decadente, arruinado y obsesionado por el juego. Su prestigio social caerá del todo cuando se enamore de una impetuo ,sa gitana y la invite a vivir en su casa. Pero Belle, la gitana, no tiene otro propósito en su mente que los de robar al aristócrata todo cuanto pueda. Una película, pues, con el sentido de clase, la pasión del amor y la fuerza del destino como temas. La rodó Losey años después de su encontronazo con las huestes del senador Mc...

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The gypsy and the gentleman, 1957 (107 minutos). Director: Joseph Losey. Intérpretes: Melina Mercuri, Keíth Mitchell.Sir Paul Deverill es un noble decadente, arruinado y obsesionado por el juego. Su prestigio social caerá del todo cuando se enamore de una impetuo ,sa gitana y la invite a vivir en su casa. Pero Belle, la gitana, no tiene otro propósito en su mente que los de robar al aristócrata todo cuanto pueda. Una película, pues, con el sentido de clase, la pasión del amor y la fuerza del destino como temas. La rodó Losey años después de su encontronazo con las huestes del senador McCarthy, que le costó el exilio y la imposibilidad de firmar las películas con su propio nombre. Su carrera pasaba por un impasse. El criminal o El sirviente aún no habían llegado en su ayuda. Sin embargo, se aplicó en esta historia dándole un especial tratamiento plástico, con referentes pictóricos concretos e imágenes en estado de delirio. Tal vez el problema mayor fuera el cast, encabezado por un Keith Mitchell demasiado blando, incapaz de expresar todas sus complejidades interiores, y una Melina Mercuri en exceso histriónica.

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