Crítica:

Bellísima

23.50 / Antena 3Bellissima, 1951 (106 minutos). Director: Luchino Visconti. Intérpretes: Anna Magnani, Walter Chiari, Tina Apicella.La historia de una mujer fascinada por ese cine que desde el patio de su casa contempla al atardecer (John Wayne y Montgomery Clift en Río Rojo, por ejemplo) y que un día decide llevar a su pequeña hija a los estudios de Cinecittá a realizar una prueba para actriz (el mismísimo Alessandro Blasetti es quien realiza la prueba). Sin embargo, los oropeles prometidos por los sueños de la pantalla se desvanecen al entrar en contacto con la realidad ...

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23.50 / Antena 3Bellissima, 1951 (106 minutos). Director: Luchino Visconti. Intérpretes: Anna Magnani, Walter Chiari, Tina Apicella.La historia de una mujer fascinada por ese cine que desde el patio de su casa contempla al atardecer (John Wayne y Montgomery Clift en Río Rojo, por ejemplo) y que un día decide llevar a su pequeña hija a los estudios de Cinecittá a realizar una prueba para actriz (el mismísimo Alessandro Blasetti es quien realiza la prueba). Sin embargo, los oropeles prometidos por los sueños de la pantalla se desvanecen al entrar en contacto con la realidad y toda ilusión se torna desesperanza. Visconti -a partir de un guión de Suso Cecchi d'Amico y Francesco Rosi, inspirado en un argumento de Cesare Zavattini- nos propone así una visión desgarrada del arte de las apariencias por excelencia frente al poderoso monstruo de la verdad absoluta e inamovible. Bellísima es un melodrama realista espléndido que puede verse como testimonio de una época.

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