BALONMANO / CAMPEONATO DEL MUNDO

España disputa hoy a Hungría el quinto puesto

ENVIADO ESPECIAL, Los milagros en el deporte, salvo que haya algún tipo de amaño, no suelen producirse. España acabó ayer con estrépito ante la Unión Soviética su sueño de lograr una medalla en el Campeonato del Mundo de balonmano. Pero, al menos, jugará hoy contra Hungría (20.00 horas, TVE-2) por el quinto puesto, el mismo que consiguió en la edición anterior, la de Suiza 86, y en los Juegos Olímpicos de Moscú 80 -sus mejores clasificaciones de siempre-, gracias a la inesperada victoria de Islandia sobre la República Democrática de Alemania por 19-17.Los soviéticos, aunque no se jugaban nada ...

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ENVIADO ESPECIAL, Los milagros en el deporte, salvo que haya algún tipo de amaño, no suelen producirse. España acabó ayer con estrépito ante la Unión Soviética su sueño de lograr una medalla en el Campeonato del Mundo de balonmano. Pero, al menos, jugará hoy contra Hungría (20.00 horas, TVE-2) por el quinto puesto, el mismo que consiguió en la edición anterior, la de Suiza 86, y en los Juegos Olímpicos de Moscú 80 -sus mejores clasificaciones de siempre-, gracias a la inesperada victoria de Islandia sobre la República Democrática de Alemania por 19-17.Los soviéticos, aunque no se jugaban nada porque ya eran finalistas, son superiores y, encima, tuvieron su dosis de suerte ante los españoles, que se descontrolaron demasiado al final. La única oportunidad del equipo de Javier García Cuesta de aspirar al empate pasaba por jugar con un nivel de errores casi nulo. Eso tampoco se produjo.

El seleccionador español, consciente de que no tiene tiradores para contrarrestar a los gigantes de la URSS, optó por la baza de la rapidez en los ataques. En buena lógica, la mejor opción era marcar muchos goles para evitar el contraataque soviético, un arma de mortífera perfección. Pero ello pasaba también por presionar en la defensa, tener más precisión en los lanzamientos y no fallar tantos penaltis.

El nivel de ejecución de todo ello, frente a un adversario normal, no habría sido tan malo hasta los diez minutos finales. Buena prueba fueron los 28 goles marcados, aunque el fuerte ritmo llevara a mayores imprecisiones y pérdidas del balón. En todo el torneo, Polonia, el que más, había logrado 21 ante la URSS. Yugoslavia, 20, pero recibiendo únicamente 22, pues cuidaba la diferencia de goles, lo que le ha servido para aspirar al bronce al humillar ayer a Polonia por 33-20.

El problema español ha sido que, tras una serie de cuatro victorias muy meritorias, las dos últimas derrotas han resultado aplastantes. Ayer resistió el primer tiempo con diferencias de tres y cuatro goles y soñando siempre con encauzar la racha de juego. Pero fue imposible ante un contrario que respondía cada vez con armas distintas y mejores.

La URSS echó por tierra los porcentajes de paradas de Rico, que debió ser sustituido por Fort, aunque volvió después, ya en la primera parte. Apenas llevaba un raquítico 30% de aciertos.

La insultante juventud del equipo español, procedente en su mayoría de la selección doble campeona mundial junior, había tocado techo. Su desparpajo de finalista en la categoría joven no resistía ya la presión de los mayores, en el caso soviético un muro que acompleja.

La envergadura de los soviéticos resultó impresionante en comparación con la de los españoles. Tuchkin, su principal brazo armado, mide 2,03 metros y sólo juega en el ataque; Atavin, 1,98; Nesterov, un pivote de 2,06, estuvo imparable. Como repuestos, Tschepkin, 2,08, y Kisilev, 2.00. En España ningún titular llega a los dos metros. Si a esto se añade un contraataque temible, la URSS se convierte en una máquina demoledora que mañana difícilmente será sorprendida por Suecia en la final.

Resultados y clasificaciones: Grupo de Ostrava: Francia, 31; Corea del Sur, 24. Checoslovaquia, 20; Hungría, 20. Rumania, 20; Suecia, 19. Suecia, 8 puntos (+29 de diferencia entre los goles marcados y los recibidos); Rumania, 8 (+12); Hungría, 7 (+2); Checoslovaquia, 4 (-9); Francia, 3 (-6), y Corea del Sur, 0(-28). Grupo de Bratislava: URSS, 38; España, 27. Yugoslavia, 33; Polonia, 20. Islandia, 19; RDA, 17. URSS, 10 (+39); Yugoslavia, 6 (+18); España, 6 (-5); RDA, 4 (-5); Islandia, 2 (-16), y Polonia, 2 (-31).

Fase final en Praga: Hoy: Polonia-Corea del Sur, por el undécimo puesto). España-Hungría (20.00 horas, TVE-2), por el quinto. Mañana: Francia-Islandia, por el noveno; Checoslovaquia-RDA, por el séptimo; Yugoslavia-Rumania, por el tercero, y URSS-Suecia (15.30), por el primero.

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