El Barcelona sobrevivió a sus errores
El partido que disputaron ayer Limoges y Barcelona correspondía a la Copa de Europa, vaya por delante. Por más que se asemejase a cualquier competición juvenil. Pero el equipo azulgrana sobrevivió a sus propios errores y se adjudicó una victoria que resultaba fundamental en su camino hacia la final four.El equipo azulgrana cambió más de la cuenta, aún teniendo en cuenta la ausencia de Epi y la baja forma de Jiménez, ambas situaciones propiciadas por sendas lesiones. Teniendo estos factores en cuenta, así como la sincronizada y agresiva defensa zonal que utilizó el Limoges, el Barcelona ...
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El partido que disputaron ayer Limoges y Barcelona correspondía a la Copa de Europa, vaya por delante. Por más que se asemejase a cualquier competición juvenil. Pero el equipo azulgrana sobrevivió a sus propios errores y se adjudicó una victoria que resultaba fundamental en su camino hacia la final four.El equipo azulgrana cambió más de la cuenta, aún teniendo en cuenta la ausencia de Epi y la baja forma de Jiménez, ambas situaciones propiciadas por sendas lesiones. Teniendo estos factores en cuenta, así como la sincronizada y agresiva defensa zonal que utilizó el Limoges, el Barcelona padeció un auténtico calvario para evidenciar que, cuanto menos, tenía la intención de acabar en canastas sus posesiones de pelota.
La indecisión en las jugadas de ataque resultó tan exasperante que hizo cambiar en multitud de ocasiones de táctica a Aíto García Reneses. A ello se añadieron los fallos contumaces en los pases y la falta de contraataque. Y pese a todo, el Barcelona ganó el encuentro.
La victoria en tan negativas circunstancias se debió a que los jugadores azulgranas compensaron su desacierto con su defensa individual y a que vieron cómo su rival ofrecía una débil respuesta.
Por otra parte, el Joventut derrotó al Orthez (78-87) en partido corrspondiente a los octavos de final de la Copa Korac. El CAI venció (93-73) al Cholet y superó la renta de 18 puntos que llevaba el cuadro galo.