El Atlético reduce su deuda con Jesús Gil en 689 millones sin que los auditores acierten a explicarlo

La deuda que el Atlético de Madrid tiene con su presidente, Jesús Gil, ha presentado variaciones sustanciales en las tres auditorías efectuadas al club y depositadas en la Liga Profesional. En junio de 1988, el Atlético le debía a Gil 589 millones; en agosto del mismo año, 971 millones, y en junio de 1989, la deuda bajó hasta los 282 millones. Los auditores no se explican las causas de tales variaciones y ponen salvedades a movimientos que además no pasan por la cuenta de resultados, lo cual quiere decir que Gil ha podido perdonar o cobrar 689 millones. El Atlético debe unos 3.200 millones de ...

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La deuda que el Atlético de Madrid tiene con su presidente, Jesús Gil, ha presentado variaciones sustanciales en las tres auditorías efectuadas al club y depositadas en la Liga Profesional. En junio de 1988, el Atlético le debía a Gil 589 millones; en agosto del mismo año, 971 millones, y en junio de 1989, la deuda bajó hasta los 282 millones. Los auditores no se explican las causas de tales variaciones y ponen salvedades a movimientos que además no pasan por la cuenta de resultados, lo cual quiere decir que Gil ha podido perdonar o cobrar 689 millones. El Atlético debe unos 3.200 millones de pesetas, 200 más que en la anterior auditoría.

Los auditores ponen diversas salvedades a las cuentas del Atlético y no se atreven a emitir opinión sobre el curioso hecho de que el club tenga una deuda " exigible, líquida y vencida" que ha variado sustancialmente en tres auditorías. Así, de un año para otro, el Atlético aumentó su deuda con Gil en 382 millones de pesetas para la temporada siguiente, reducirla en 689 millones. Gil mantiene cuentas bancarias comunes con el Atlético de Madrid con el fin de preservar algunos ingresos del club a los embargos.Las dos primeras temporadas de gestión de Jesús Gil han dado resultados negativos. El Atlético perdió 146 millones e la temporada 1987-88 y 223 millones en la temporada pasada.

Sin embargo, los auditores señalan que éste último resultado fue mayor en 26 millones porque el Atlético no repercutió en su contabilidad el IVA correspondiente a los abonos de socios. El club tiene un patrimonio neto negativo de 2.200 millones de pesetas.

Gil se había convertido hace un año en el principal acreedor del Atlético, cuando la contabilidad señalaba que el club le debía 971 millones de pesetas. Ahora no es así, puesto que, entre Hacienda y Seguridad Social, la deuda pública del club madrileño es de 1.300 millones de pesetas.

Curiosamente, Gil presentó su mejor auditoría con fecha de 30 de junio de 1989meses antes de que intentara el asalto a la vicepresidencia económica de la Liga Profesional. Según fuentes de la Liga, Gil no podría acceder a un cargo de esta naturaleza con unas auditorías que reflejaran serias dudas, como fueron las anteriores, aunque no podía evitar que el Atlético quedase situado como el club de Primera División con la principal deuda global. Algunos socios opositores manifestaron, en su momento, su intención de demandar a Gil por la vía penal a raíz de los datos contables del club.

Campaña en la Liga

Gil, hace meses, inició una campaña en la que solicitó de las autoridades deportivas que condonasen a los clubes la deuda pública como la forma ideal para permitir un saneamiento rápido del fútbol español. Gil se presentó ante otros compañeros como el negociador ideal para iniciar tal cruzada contra la Administración.

Sin embargo, cuando parecía que todo estaba atado para que accediera al cargo, perdió en la votación final en beneficio de Ramón Mendoza, presidente del Real Madrid, y justo días después de haber iniciado un duro conflicto verbal a consecuencia del Atlético-Madrid de Copa del Rey que le ha costado un expediente.

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