El Barcelona abre el Open McDonald's ante Denver en uno de su peores momentos

Denver Nuggets y Barcelona abren hoy (18.00 horas) el Open McDonald's -único torneo oficial en el que se enfrentan equipos de la NBA contra clubes europeos-, y en el que también intervienen el Pbilips de Milán y la Jugoplastica de Split, que jugarán a continuación (20.30). La organización del evento cuesta 250 millones de pesetas, y será transmitido por más de 50 canales de televisión. Las 12.700 localidades del palacio de Deportes de Roma, donde se disputará el torneo, están prácticamente agotadas desde hace varios días.

La expectación por ver a los Denver Nuggets frente a equipos euro...

Denver Nuggets y Barcelona abren hoy (18.00 horas) el Open McDonald's -único torneo oficial en el que se enfrentan equipos de la NBA contra clubes europeos-, y en el que también intervienen el Pbilips de Milán y la Jugoplastica de Split, que jugarán a continuación (20.30). La organización del evento cuesta 250 millones de pesetas, y será transmitido por más de 50 canales de televisión. Las 12.700 localidades del palacio de Deportes de Roma, donde se disputará el torneo, están prácticamente agotadas desde hace varios días.

La expectación por ver a los Denver Nuggets frente a equipos europeos es extraordinaria en Roma, pero no puede compararse al esperado duelo entre los Milwaukee Bucks y la selección soviética en la primera edición del torneo, o al desembarco de los Boston Celtics en Madrid el año pasado. Para los directivos de los principales equipos europeos la cita adquiere su verdadero significado si pueden seguir estirando de la cuerda y consiguen convencer al comisionado de la NBA, David Stern, para que realice alguna promesa en firme sobre la creación de una división europea. Para Stern, por su parte, la ocasión es idónea a fin de continuar penetrando en el mercado europeo y hacer nuevos contratos para la transmisión de partidos de la NBA por las televisiones europeas.El partido contra Denver llega para el Barcelona en uno de sus peores momentos de los últimos años. Aito García Reneses y sus jugadores no han podido apenas estudiar el reglamento mixto con parte de las reglas de la NBA y parte de la FIBA, vigente en el torneo. El entrenador azulgrana ya no sólo se queja de las ausencias de algunos de sus mejores jugadores como Trumbo o Epi -éste a pesar de ello se desplazó a Roma-, sino qúe a raíz de la cuarta derrota en la liga ante el Real Madrid, ha reconocido en su equipo "un espíritu muy pobre" y lo ha juzgado con dureza: "Hemos dado una imagen lamentable y por el hecho de fallar no podemos hacer huelga de brazos caídos".

Ponerse en órbita

El torneo sigue siendo para todos los componentes del Barça "un experimento muy interesante más que un partido importante" y, dice Aito: "No pensamos en las batallas actuales sino en ponernos en órbita para momentos más importantes".El técnico del Barcelona opina que el reglamento con el que se va ajugar el torneo es determinante y que "es más cercano al de la NBA que al de la FIBA". Las reglas que se utilizarán en el torneo son efectivamente 26 de la NBA por sólo ocho de la FIBA. La procedencia de los árbitros sí es equitativa: dos estadounidenses (Evans y Mathis) y dos europeos (Douvris y Jungebrand). "Con nuestro reglamento", dice Aito, "y el equipo en buenas condiciones podríamos plantar cara a Denver, pero tal como está la situación sólo aspiramos a no hacer el ridículo". Los problemas para el Barcelona pueden ser aún mayores si Audie Norris no mejora de las molestias que arrastra en sus rodillas y que ayer le impidieron entrenarse normalmente.

El Open está a la expectativa de saber si su máxima figura, Alex English, el único jugador en la historia de la NBA que ha conseguido más de 2.000 puntos durante ocho temporadas consecutivas, está en condiciones de actuar por una pequeña lesión. English, junto a Lafayette Lever y Michael Adams, forman la base del equipo.

Denver es uno de los equipos de la zona media alta en las clasificaciones de la NBA en las que ha jugado los play-off durante las ocho últimas temporadas. Es uno de los pocos equipos en el mundo que da cierta preponderancia a su juego de ataque, faceta en la que responde a la personalidad de su técnido Doug Moe, elegido hace dos años como el mejor entrenador de la temporada en la NBA. Moe afirmó en su llegada a Roma que su objetivo en el torneo es mejorar el juego de conjunto de su equipo "porque jugamos muy pocos partidos antes de la Liga y ésta es una oportunidad para mejorar, aunque también para divertirse".