Alfonso Iglesias, 'Alfonso', humorista y dibujante

El dibujante y humorista Alfonso Iglesias López de Vivigo, Alfonso, creador de los personajes Pinón, Telva y Pinín, falleció en Oviedo a los 78 años de edad, víctima de un edema pulmonar.Alfonso Iglesias se dio a conocer como dibujante e historietista en el desaparecido diario Región, de Oviedo, pero fue en el periódico La Nueva España donde alcanzó su máxima popularidad con la creación de tres personajes que encarnan, con un gran humanismo, los caracteres más peculiares del talante asturiano. Colaboró también en los diarios madrileños El ...

El dibujante y humorista Alfonso Iglesias López de Vivigo, Alfonso, creador de los personajes Pinón, Telva y Pinín, falleció en Oviedo a los 78 años de edad, víctima de un edema pulmonar.Alfonso Iglesias se dio a conocer como dibujante e historietista en el desaparecido diario Región, de Oviedo, pero fue en el periódico La Nueva España donde alcanzó su máxima popularidad con la creación de tres personajes que encarnan, con un gran humanismo, los caracteres más peculiares del talante asturiano. Colaboró también en los diarios madrileños El Alcázar, Arriba, Pueblo y Abc, en la revista Ama y, desde 1962, en Televisión Española, como dibujante para programas infantiles, culturales y deportivos. Entre su obra figura también una amplia producción como cartelista y acuarelista. Fue el impulsor, en 1950, del Día de América en Asturias, una de las fiestas más populares de la capital asturiana y con la que se pretende hermanar a los asturianos de uno y otro lado del océano. Era autor de varias comedias, así como de algunos libros de historietas; entre ellas, Cien chistas de Pinón y Telva; Las aventuras de Pinín, que de Pinón ye sobrin; La aldea moderna, etcétera.

Nacido en Navia el 10 de enero de 1910, estudió ciencias químicas, que abandonó por el dibujo. Está considerado como uno de los dibujantes más importantes nacidos en la región. Sus personajes alcanzaron una gran popularidad, que aún conservan, en particular Pinín, del que se difundieron álbumes de cromos coleccionables, dio nombre a una marca de cacao y cuyas aventuras fueron llevadas al cine en 1979 por el director Antonio Arévalo y la productora asturiana Pelbat Films.