Tribuna:

'Spot'

París. Exterior, noche. Una serie de planos cortos, en rápida sucesión, nos muestran al piloto calándose el casco, ajustándose los guantes. Un plano general, y vemos el coche, francés, aerodinámico, potente. Musiquilla de acordeón mientras la cámara traza una panorámica y el coche da vueltas enloquecidas a la torre Eiffel, bellamente iluminada. En off, una voz femenina, de terciopelo, susurra: "Para hombres que no tienen miedo, para hombres que aman el peligro".África. Exterior, día. El mismo coche de la secuencia anterior circula a toda velocidad por un sendero del desierto. El sol arr...

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París. Exterior, noche. Una serie de planos cortos, en rápida sucesión, nos muestran al piloto calándose el casco, ajustándose los guantes. Un plano general, y vemos el coche, francés, aerodinámico, potente. Musiquilla de acordeón mientras la cámara traza una panorámica y el coche da vueltas enloquecidas a la torre Eiffel, bellamente iluminada. En off, una voz femenina, de terciopelo, susurra: "Para hombres que no tienen miedo, para hombres que aman el peligro".África. Exterior, día. El mismo coche de la secuencia anterior circula a toda velocidad por un sendero del desierto. El sol arranca destellos de la carrocería cubierta de arena. Primerísimo plano del piloto, que aparece de perfil. Suda profusamente y se muerde los labios, pero su gesto es de rotunda determinación. Música de fondo: un excitante canto tribal. Voz en off femenina: "Para hombres que no se vuelven atrás".

África. Exterior, día. Plano americano del piloto, de pie fuera del coche, echando agua en el carburador. La cámara retrocede, en zoom, y vemos un paisaje desolado en el que se distinguen algunas carrocerías retorcidas y humeantes. Plano corto del piloto mirando a su alrededor, seguido de otros igualmente cortos sobre sus manos abriendo el coche, abrochándose el cinturón de seguridad, aferrándose al volante. Sobre el ruido del motor al arrancar, la voz en off: "Para hombres que no conocen el miedo".

África. Exterior, día. Plano subjetivo. Los ojos del piloto son la cámara, que avanza rápidamente sorteando todo tipo de accidentes del terreno. Aparece un poblado al fondo. Es una recta. El conductor acelera. Algo topa contra el morro de la carrocería. El ruido del motor es ensordecedor. Plano general. En el camino queda, destrozado, un cuerpo pequeño de color oscuro. La cámara recorre, en travelling lateral, al grupo de espectadores nativos que han contemplado el incidente. Plano corto de uno de los nativos haciendo el signo de la victoria. Voz en off. "Tururú, un coche para hombres de hoy".

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