Carmen Romero,

esposa del presidente del Gobierno, Felipe González, muestra cada día menos interés por la vida estrictamente oficial en la que como segunda dama del Estado se ve inmersa. La ausencia más significativa fue durante el viaje a nuestro país, el pasado mes de diciembre, del presidente de la República de Portugal, el socialista Mario Soares, que mantiene una fuerte y vieja amistad con Felipe González. Un portavoz del palacio de la Moncloa disculpó la incomparecencia de Carmen Romero con el argumento de que "se encontraba en Italia en un viaje privado, concretamente de compras". La aus...

esposa del presidente del Gobierno, Felipe González, muestra cada día menos interés por la vida estrictamente oficial en la que como segunda dama del Estado se ve inmersa. La ausencia más significativa fue durante el viaje a nuestro país, el pasado mes de diciembre, del presidente de la República de Portugal, el socialista Mario Soares, que mantiene una fuerte y vieja amistad con Felipe González. Un portavoz del palacio de la Moncloa disculpó la incomparecencia de Carmen Romero con el argumento de que "se encontraba en Italia en un viaje privado, concretamente de compras". La ausencia de la mujer del presidente ocasionó problemas de protocolo en la organización de algunos actos oficiales de este viaje. Carmen Romero, que desde su llegada a la Moncloa nunca ha mostrado especial interés por su papel oficial de segunda dama, tan sólo acompañó el último año a su marido en los viajes que éste realizó a Túnez, Egipto y Brasil, y prefirió quedarse en casa cuando Felipe González viajó a Lisboa, Bruselas, Luxemburgo, Bonn, Argentina, Uruguay, México y París.Pocos días después de que el PSOE llegara al poder, en octubre de 1982, y Felipe González y Carmen Romero se convirtieran en huéspedes de la Moncloa, la mujer del presidente realizó una declaración de independencia: "Seguiré haciendo con Felipe la misma vida que hasta ahora. Le acompañaré cuando yo crea que puedo hacerlo, que es compatible con mi vida. Estaré con él cuando me apetezca y cuando crea que las relaciones de cortesía y educación así lo imponen". Odette Suárez de Paga, secretaria personal de Carmen Romero, considera que no se ha experimentado ningún cambio significativo en su vida protocolaria y que siempre está cuando debe estar", y ha calificado de "relativa" la obligación de la mujer del presidente de asistir a todos los actos oficiales.

Carmen Romero disculpó años atrás su no comparecencia a determinados actos y viajes oficiales con el argumento de que quería mantener su actividad profesional como profesora de lengua y literatura en el instituto madrileño Calderón de la Barca. En la actualidad, la mujer del presidente se encuentra en período de excedencia. Mañana, Carmen Romero tiene previsto asistir a una recepción al cuerpo diplomático que tendrá lugar en el palacio Real.