Crítica:

Comedia genial

Antes de ser sumo sacerdote de la mejor comedia americana, Bill y Wilder fue guionista. Con la colaboración de Charles Bracket , a él se deben piedras preciosas del tamaño de La octava mujer, de Barba Azul, Minotchka (ambas de Lubitsch) o Medianoche (de Mitchell Leisen), y también del tamaño de Bola de fuego, genial comedia dirigida por Howard Hawks en 1941, con Gary Cooper y Barbara Stanwyck de pretagonistas inmejorables.Todas estas películas suponen la cúspide de un género generoso: provoca risas, alegrías, vitalidad.. Pocas veces el cine ha hablado con tanta gracia. Cas...

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Antes de ser sumo sacerdote de la mejor comedia americana, Bill y Wilder fue guionista. Con la colaboración de Charles Bracket , a él se deben piedras preciosas del tamaño de La octava mujer, de Barba Azul, Minotchka (ambas de Lubitsch) o Medianoche (de Mitchell Leisen), y también del tamaño de Bola de fuego, genial comedia dirigida por Howard Hawks en 1941, con Gary Cooper y Barbara Stanwyck de pretagonistas inmejorables.Todas estas películas suponen la cúspide de un género generoso: provoca risas, alegrías, vitalidad.. Pocas veces el cine ha hablado con tanta gracia. Casi nunca hemos visto situaciones tan brillantes como en estas obras y otras análogas. Y en rara ocasión la comedia ha gozado de un ritmo (un tempo, en nuestra jerga) tan dinámico, medido con cartabón imaginario por auténticos maestros de la puesta en escena. Howard Hawkstiene esta obra maestra y tiene otras: La fiera de mi niña, Luna nueva, La novia era él... Perfecciones.

No hay en Bola de fuego ni tiempos muertos ni momentos que se sustraigan al calificativo de geniales. La comedia es siempre suave y picante, todo a un tiempo. Indicada para nuestro ocio y para nuestras necesidades culturales, que aunque a muchos se les escape, Bola de fuego es cultura en primera instancia.

Bola de fuego se emite hoy a las 22.05 por TVE1.

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