Muere una niña de ocho meses, arrollada por un coche que circulaba en dirección contraria

Una niña de ocho meses de edad, Tania Tamara Alonso, falleció en la tarde del martes al ser alcanzada, de rebote, por un vehículo que colisionó con otro cuando el primero circulaba en dirección contraria.El accidente ocurrió a las 16.50 horas del martes, en la esquina de las calles de las Magnolias y San Benito, detrás de la plaza de Castilla y frente a las cocheras de la Compañía Metropolitana. Con la colisión, uno de los dos vehículos salió despedido y arrolló a la niña, que iba en un cochecito de bebé empujado por su madre. Aunque la niña fue trasladada inmediatamente a la residencia sanita...

Una niña de ocho meses de edad, Tania Tamara Alonso, falleció en la tarde del martes al ser alcanzada, de rebote, por un vehículo que colisionó con otro cuando el primero circulaba en dirección contraria.El accidente ocurrió a las 16.50 horas del martes, en la esquina de las calles de las Magnolias y San Benito, detrás de la plaza de Castilla y frente a las cocheras de la Compañía Metropolitana. Con la colisión, uno de los dos vehículos salió despedido y arrolló a la niña, que iba en un cochecito de bebé empujado por su madre. Aunque la niña fue trasladada inmediatamente a la residencia sanitaria La Paz por un taxista que circulaba detrás de uno de los dos vehículos protagonistas del accidente, no se pudo hacer nada por ella.

La calle de las Magnolias es paralela al paseo de la Castellana, una vez pasada la plaza de Castilla, y es dirección única hacia el Norte. La calle de San Benito es de dos direcciones en toda su longitud, excepto en el tramo comprendido entre la calle de las Magnolias y la calle del Cañaveral, apenas una treintena de metros, que son de dirección única. Esta circunstancia provoca numerosos despistes entre los automovilistas, según afirmaron vecinos de la zona que han sido testigos de los habituales accidentes que se originan en la esquina en cuestión.

Los empleados de un taller mecánico situado muy cerca de la esquina, y que fueron testigos presenciales del accidente, declararon a este periódico que el martes, a la hora indicada, un joven de 21 años de edad, que luego fue identificado como Juan Pedro Carrasco, bajó por la calle de San Benito, llegó al tramo en que ésta se convierte en dirección única y aparcó frente a una farmacia.

El establecimiento estaba cerrado y el conductor del vehículo, un Ford Fiesta, posiblemente para evitarse dar una serie de rodeos por la zona antes de poder tomar la dirección por la que vino, prefirió hacer una maniobra y recorrer los escasos 10 metros que le separaban del tramo de la calle que era de nuevo de dos direcciones.

Cuando asomaba el morro del vehículo por la esquina de San Benito y de las Magnolias, chocó violentamente con otro vehículo, un Fiat, que circulaba a buena velocidad por la segunda.

El Ford Fiesta salió despedido por la violencia del golpe. En ese mismo momento se encontraba en la esquina enfrentada a la que se produjo el choque una mujer de unos 25 años de edad, María del Carmen Alonso.

Cochecito en la calzada

La mujer estaba en la acera -que en ese lugar es apenas de unos 70 centímetros de ancho- y el cochecito donde iba su hija estaba apoyado en la calzada. El Ford Fiesta arrolló el coche del bebé y lo hizo chocar con un tercer vehículo que estaba aparcado. La niña Tania Tamara quedó atrapada entre ambos vehículos. La fuerza del golpe le causó lesiones internas, a las que no pudo sobrevivir.Un taxista que circulaba detrás del Fiat tomó inmediatamente a la niña y a su madre y las llevó a la cercana residencia de La Paz, donde murió a poco de llegar. El coche de bebé quedó en custodia en el taller mecánico, a la espera de que la policía fuera a recogerlo.