BALONCESTO

El Barcelona y el Limoges, clasificados para la final de la Copa Korac

El Barcelona utilizó ayer todas las piezas a su disposición para machacar la ventaja del Mobilgirgi, que ganó en Caserta por 96-87, y clasificarse para la final de la Copa Korac frente al Limoges (el 18 de marzo se jugará el partido de ida en el Palau Blaugrana y una semana después, el 25, el de vuelta en el pabellón del equipo francés).El público azulgrana recuperó una tradición que se había olvidado en los últimos meses, calentó el ambiente incluso antes de que se iniciara el partido (Dell'Agnello propinó un guantazo a un espectador que retenía un balón durante el calentamiento) y colaboró e...

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El Barcelona utilizó ayer todas las piezas a su disposición para machacar la ventaja del Mobilgirgi, que ganó en Caserta por 96-87, y clasificarse para la final de la Copa Korac frente al Limoges (el 18 de marzo se jugará el partido de ida en el Palau Blaugrana y una semana después, el 25, el de vuelta en el pabellón del equipo francés).El público azulgrana recuperó una tradición que se había olvidado en los últimos meses, calentó el ambiente incluso antes de que se iniciara el partido (Dell'Agnello propinó un guantazo a un espectador que retenía un balón durante el calentamiento) y colaboró en la tarea colectiva de descentrar al brasileño Óscar y sus compañeros.

En la cancha, Aito utilizó alternativamente a Jiménez, De la Cruz y Sibilio como kamikazes para frenar a cualquier precio a Oscar. La máquina azulgrana funcionó tan bien que sobrepesó las expectativas del propio Aito, que en el descanso (52-38) se mostraba preocupado porque se había superado "muy pronto" la ventaja del Mobilgirgi.

El equipo italiano, acostumbrado a los partidos difíciles, fue desbordado ayer por el escenario del Palau. El público, que llenó las gradas (unas 6.000 personas) dejó en ellas toda la adrenalina acumulada durante semanas. Parte de esa adrenalina, además, fue trasplantada al equipo azulgrana, que jugó un partido perfecto en planteamiento. Aito utilizó a Jiménez como marcador de Óscar y, cuando el brasileño comenzó a protestar, recurrió a De la Cruz para descentrarle totalmente con un marcaje de lapa. Pese a sufrir prácticamente una falta personal en cada ataque, que muchas veces los árbitros no señalaron, Óscar mantuvo su prestigio con los 42 puntos conseguidos. Pero la continua presencia de un barcelonista junto a él obligó a buscar nuevas opciones de tiro a- su equipo y el Mobilgirgi demostró que se ha acomodado en demasía a Óscar.

Limoges, 104; CAI, 91

El CAI Zaragoza, que ya había perdido en su cancha por 76-85, tenía una misión casi imposible en Limoges. Y, en efecto, no pudo llevarla a cabo. En realidad, nunca tuvo opción alguna ante el equipo francés, que le superó en el descanso por 42-3 8 y al final por 104-91.

Limoges: Beugnot (12), Dacoury (21), Ostrowski (30), Thompson (19), Evert (6), Monclar (2), Vestris (4) y Kea (10).

CAI Zaragoza: Díaz (23), Capablo (7), F. Arcega (10), Llorente (18), Riley (19), J. A. Arcega (9) y Haro (5).

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