Las federaciones abandonaron el pleno del COE al no lograr la modificación de los estatutos

La gran mayoría de los representantes de las federaciones españolas, tanto olímpicas como no olímpicas, abandonaron ayer el pleno del Comité Olímpico Español (COE) tras no lograr la modificación del sistema de votación y el cese de todos los cargos directivos. Ambos apartados se votaron conjuntamente y no lograron la aprobación de los dos tercios de la asamblea, que continuó después con 47 miembros de los 109 que la iniciaron. Fue entonces cuando el presidente, Alfonso de Borbón, propuso repetir la votación, pero sólo la de la reforma en el reparto de votos, que fue aprobada.

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La gran mayoría de los representantes de las federaciones españolas, tanto olímpicas como no olímpicas, abandonaron ayer el pleno del Comité Olímpico Español (COE) tras no lograr la modificación del sistema de votación y el cese de todos los cargos directivos. Ambos apartados se votaron conjuntamente y no lograron la aprobación de los dos tercios de la asamblea, que continuó después con 47 miembros de los 109 que la iniciaron. Fue entonces cuando el presidente, Alfonso de Borbón, propuso repetir la votación, pero sólo la de la reforma en el reparto de votos, que fue aprobada.

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El pleno tuvo como único tema la modificación de los estatutos con un punto caliente: el sistema de votación. En el COE cada miembro tiene un voto, lo que da la mayoría a las federaciones no olímpicas, y la fórmula que se propuso fue la de con ceder cinco votos a cada una de las 28 federaciones que figuran en el programa olímpico; tres, a las 10 reconocidas por el COI, pero que aún no tienen disciplinas olímpicas; dos, a las 25 restantes, y uno, a los 43 miembros con cargos en las federaciones a los 12 miembros por elección, a los tres miembros del COI, a los dos representantes de Prensa y al del Ministerio de Asuntos Exteriores. De esta manera, las federaciones olímpicas pedirían sumar 170 votos de los 290 totales. Este sistema se aprobó primero a mano alzada (65 a favor, 8 en contra y 15 abstenciones), pero posteriormente se advirtió de que este punto se encontraba vinculado a la disposición transitoria por la que todos los cargos se ponían a disposición de la asamblea. Se repitió entonces la votación, esta vez secreta a petición del presidente, Alfonso de Borbón, y el resultado fue de 64 votos a favor, 39 en contra, cinco en blanco y una abstención. Para su aprobación hacían falta los dos tercios de los votos, 73.La modificación más importante de los estatutos quedaba así abortada. Las federaciones solicitaron entonces un descanso, en el que debatieron la estrategia a seguir. Se acordó firmar un documento por el que se solicita la inmediata intervención del COI porque los estatutos actuales "son contrarios a la Carta Olímpica", que dice que las federaciones olímpicas han de tener la mayoría de votos.

Nueva votación

Nada más abandonar la asamblea 62 de sus miembros, el presidente propuso que se sometiera de nuevo a la aprobación del pleno la reforma del sistema de votación, independientemente del cese de los cargos directivos. Entonces sí se lograron los dos tercios de los votos con 41 a favor y 6 abstenciones.

En el pleno hubo abiertas críticas contra la gestión del Comité Ejecutivo del COE Luis Báguena, presidente de la federación de yudo, abanderó las censuras "a quienes han sido incapaces de resolver la crisis, que dura ya dos años" Benito Castejón, máximo mandatario del deporte en años pasados, fue, por contra, el mejor defensor de Alfonso de Borbón "No podemos entrar en una dinámica de ceses", dijo.

También Alfredo Flórez presidente de la federación de natación, y Pedro Walch, de la de salvamento y socorrismo, se convirtieron en portavoces de la oposición a la gestión presidencial. Joaquín Díez, de la de pesca, intervino a favor, pero sólo para solicitar la votación separada del nuevo sistema de votación y del cese de los cargos. Tanto Joaquín Díez como llenito Castejón (vicepresidentes del COE) y Rafael Cavero (miembro por elección) y Joaquín Díez Palacios (representante de la Asociación de Periodistas) anunciaron en diversos momentos sus dimisiones sin que las hicieran efectivas.

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