Los trabajadores de Kashogui no cobran sus salarios desde el mes de agosto

El magnate árabe, Adnan Kashogui, adeuda el sueldo de tres meses, unos nueve millones de pesetas, a 60 de los trabajadores empleados en su finca La Baraka, su lugar de residencia en la Costa del Sol. Los trabajadores han puesto el caso en manos del sindicato UGT y ayer noche se reunían para decidir la interposición de una demanda laboral ante la Magistratura de Trabajo, y la posible convocatoria de huelga para la semana que viene.Los trabajadores, en su mayoría jardineros, personal de servicio, guardas y cuidadores de ganado, cobran una media de 50.000 pesetas mensuales, que no les son ...

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El magnate árabe, Adnan Kashogui, adeuda el sueldo de tres meses, unos nueve millones de pesetas, a 60 de los trabajadores empleados en su finca La Baraka, su lugar de residencia en la Costa del Sol. Los trabajadores han puesto el caso en manos del sindicato UGT y ayer noche se reunían para decidir la interposición de una demanda laboral ante la Magistratura de Trabajo, y la posible convocatoria de huelga para la semana que viene.Los trabajadores, en su mayoría jardineros, personal de servicio, guardas y cuidadores de ganado, cobran una media de 50.000 pesetas mensuales, que no les son abonadas desde el pasado mes de agosto. Ante sus requerimientos, los representantes del multimillonario árabe en Marbella, se han escudado en problemas de orden burocrático para justificar el impago. Los empleados están agrupados en cuatro sociedades diferentes: Investimar, SA; El Coscojal, SA; Banaparto, SA y Valtor Securities, encargadas de diferentes funciones, todas relacionadas con su residencia palaciega.

Los representantes de los trabajadores manifiestan haber mantenido tres reuniones con la empresa, sin resultados positivos, y señalan que la situación de algunos, vecinos de pueblos colindantes de escaso poder adquisitivo, es grave "con cuentas en establecimientos de alimentación que superan las 20.000 pesetas". No es la primera vez que se producen estos problemas. En el verano de 1985 los mismos trabajadores denunciaron el impago de dos meses de salario, que fueron abonados con una gratificación.

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