El Madrid se entrenó en el pabellón

El Real Madrid se entrenó a gusto en el pabellón y arrolló al Zbrojovka Brno checoslovaco, por 132-91. Ya le había vencido en Brno, por 82-70. Pasó así a la fase final de la Copa de Europa, junto al Maccabi (Israel), Orthez (Francia), Tracer (Italia), Zalguiris (URSS) y Zadar (Yugoslavia). El Tracer, que había perdido en Salónica con el Aris por 31 puntos, 98-67, venció en Milán por 34, 83-49.El Madrid calentó motores y se encontró con que el equipo va bien de revoluciones. Spriggs evolucionó muy bien, con síntomas de estar bastante adaptado. Verle jugar ahora, aunque sea en un partido sin int...

El Real Madrid se entrenó a gusto en el pabellón y arrolló al Zbrojovka Brno checoslovaco, por 132-91. Ya le había vencido en Brno, por 82-70. Pasó así a la fase final de la Copa de Europa, junto al Maccabi (Israel), Orthez (Francia), Tracer (Italia), Zalguiris (URSS) y Zadar (Yugoslavia). El Tracer, que había perdido en Salónica con el Aris por 31 puntos, 98-67, venció en Milán por 34, 83-49.El Madrid calentó motores y se encontró con que el equipo va bien de revoluciones. Spriggs evolucionó muy bien, con síntomas de estar bastante adaptado. Verle jugar ahora, aunque sea en un partido sin interés, es un espectáculo que compensa. A Spriggs sólo le faltó algo sencillo: encestar las canastas más fáciles. El Madrid cumplió el trámite.

Spriggs hizo ayer un poco de varías cosas, pero lo realizó bien y en sintonía con el resto del equipo., Sus pases eléctricos son mejor recibidos y ante los checos encontró multitud de fórmulas para entrar en la zona; corrió el contraataque a gusto y levantó aplausos en numerosas ocasiones.

Pero Spriggs no fue el único a tono. Iturriaga cosechó triples, se hartó de contraataques y se indigestó de robos de balón mientras estuvo en cancha. Romay está suelto, relajado. Branson es un reloj. Corbalán puso su habitual rigor. A este quinteto se incorporó Rullán, aún falto de partidos, Del Corral, que no descansa en su ambición de mostrarse siempre útil, y, otra vez, el joven Ruiz Paz, quien siguió pareciendo un jugador sin vergüenza, descarado, hecho que el público agradece. Al Real Madrid le hace falta que un casi juvenil ponga algo de rebeldía en la cancha. Los checoslovacos, mientras tanto, no existieron como rival, pero tampoco molestaron, porque lo peor de un equipo malo es que sea incapaz de permitir algo bueno. Los checos dejaron el choque en un entrenamiento a gusto del respetable.

Real Madrid: Corbalán (5), Iturriaga (23), Spriggs (35), Branson (30), Romay (10), Paz (8), Rullán (7) y Del Corral (14).

Brno: Brabenec (11), Okac (14), , Hanacek (30), Krejei (18), Harasek (5), Jandak (13).