Karpov busca hoy desquitarse de su ultima derrota en el Mundial

ENVIADO ESPECIALLa novena partida de la revancha por el título mundial de ajedrez que enfrenta a los soviéticos Gari Kasparov, de 23 años, actual campeón., y Anatoli Karpov, de 35, ex campeón, se disputa esta tarde en Londres. Se espera que Karpov, con las piezas blancas, intente desquitarse de la derrota sufrida en la oc tava. El marcador favorece a Kasparov por 4,5 puntos a 3,5. Kasparov ha ganado dos partidas; Karpov, una, y cinco fueron tablas. Será vencedor quien acumule 12,5 puntos o seis victorias. En caso de empate a 12, el campeón retendría el título. Tras la duodécima partida, el enc...

ENVIADO ESPECIALLa novena partida de la revancha por el título mundial de ajedrez que enfrenta a los soviéticos Gari Kasparov, de 23 años, actual campeón., y Anatoli Karpov, de 35, ex campeón, se disputa esta tarde en Londres. Se espera que Karpov, con las piezas blancas, intente desquitarse de la derrota sufrida en la oc tava. El marcador favorece a Kasparov por 4,5 puntos a 3,5. Kasparov ha ganado dos partidas; Karpov, una, y cinco fueron tablas. Será vencedor quien acumule 12,5 puntos o seis victorias. En caso de empate a 12, el campeón retendría el título. Tras la duodécima partida, el encuentro continuará en Leningrado.

Las enormes colas que tres horas antes de cada partida se forman en la calle Piccadilly para comprar las entradas serán hoy inútiles. El aforo de la sala de juego, 400 espectadores y el de las salas anexas, otros 400, está ya vendido desde el lunes. Los aficionadós británicos saben que el espíritu vengativo es una de las constantes en la biografía de Karpov.

El ex campeón hará el primer movimiento con las piezas blancas y, por tanto, tendrá la iniciativa. Es notorio que su preparación en las aperturas ha mejorado con respecto al encuentro del otoño pasado en Moscú, en el que perdió el título, al menos cuando juega con las blancas. Las dos últimas partidas en las que ha actuado con dicho color son buenos ejemplos. En la quinta ganó convincentemente, logrando, por fin, una clara ventaja de apertura frente a la defensa Grunfeld con que Kasparov le había sorprendido en la primera y la tercera.

En la séptima Kasparov cambié la Grunfeld por el Gambito de Dama rehusado, que ya se había empleado en 28 ocasiones durante los anteriores enfrentamientos entre ambos. Pero Karpov puso en práctica un nuevo plan estratégico que dejó a Kasparov en una posición asfixiante, sin apenas sitio para mover sus piezas. Sin embargo, el ex campeón dejó escapar una victoria relativamente fácil. Para los expertos, fue el primer aviso de que algo funcionaba mal en la mente de Karpov.

Ahora, tras una derrota casi humillante en la octava partida y cuatro días de descanso, Karpov necesita igualar el marcador antes de que el circo del ajedrez se traslade a Leningrado. Allí el ambiente le será mucho más favorable que en Londres.