La selección de la URSS ganó el premundial de Valencia al vencer a España
La selección de baloncesto de la Unión Soviética se proclamó vencedora del premundial celebrado en Valencia al derrotar en la última jornada al equipo español por el tanteo de 102-85, en partido celebrado en el pabellón municipal de la Fuente de San Luis, ante casi 2.000 espectadores. La primera parte terminó con ventaja de la URSS (47-41). El seleccionador nacional, Antonio Díaz Miguel, fue homenajeado en el descanso del encuentro. Al final, los soviéticos recibieron el trofeo de campeones.
Los primeros compases del partido fueron de dominio español, tanto en el juego como en el ma...
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La selección de baloncesto de la Unión Soviética se proclamó vencedora del premundial celebrado en Valencia al derrotar en la última jornada al equipo español por el tanteo de 102-85, en partido celebrado en el pabellón municipal de la Fuente de San Luis, ante casi 2.000 espectadores. La primera parte terminó con ventaja de la URSS (47-41). El seleccionador nacional, Antonio Díaz Miguel, fue homenajeado en el descanso del encuentro. Al final, los soviéticos recibieron el trofeo de campeones.
Los primeros compases del partido fueron de dominio español, tanto en el juego como en el marcador, aunque a los cinco minutos éste señalaba un exiguo 8-7 favorable a la selección española. Pero las cosas cambiaron a partir del primer tiempo muerto pedido por el preparador soviético, y sus pupilos tomaron las riendas del partido. La selección española aguantó el tirón en un principio, pero no pudo evitar que los soviéticos se fueran al descanso con seis puntos de ventaja.
En la segunda parte las cosas cambiaron de forma radical puesto que los soviéticos salieron en tromba y muy pronto adquirieron una cómoda ventaja en el marcador. Con un Tijanienko que se metía como quería, que lograba un triple tras otro y que los españoles no lograron frenar en ningún momento, y con un Kurtinaitis repartiendo juego, el partido fue perdió interés.
La selección de Díaz Miguel falló demasiado en defensa y tampoco estuvo acertada en el tiro y en los rebotes ofensivos, lo que permitió que los soviéticos siguieron sumando puntos, mientras a que los españoles les costaba demasiado conseguirlos. Bajo los tableros dominaron los soviéticos, con un Tkatchenko. inamovible, mientras que al final Homicius se permitió varias jugadas preciosistas, con canastas que de bella factura. Jaleada por un público entusiasta, en los últimos minutos del partido la selección española presionó en todo el campo para tratar de reducir distancias.