La marcha de Kempes condenó al Hércules

El Hércules se convirtió el domingo en el segundo equipo de Primera División en descender de categoría. Con la derrota frente al Valencia perdió sus ya escasas posibilidades de escapar del descenso. La diferencia de goles y puntos respecto a los otros candidatos al descenso le perjudicaban en todos los empates posibles al final. Su declive, en la segunda vuelta, se acentuó con la marcha del argentino Kempes al fútbol austriaco.

Desde que Mario Kempes dejó al Hércules para marchar al Vienner de Austria, donde le hicieron una oferta de 40 millones de pesetas, el equipo, no ha vuelto a ven...

El Hércules se convirtió el domingo en el segundo equipo de Primera División en descender de categoría. Con la derrota frente al Valencia perdió sus ya escasas posibilidades de escapar del descenso. La diferencia de goles y puntos respecto a los otros candidatos al descenso le perjudicaban en todos los empates posibles al final. Su declive, en la segunda vuelta, se acentuó con la marcha del argentino Kempes al fútbol austriaco.

Desde que Mario Kempes dejó al Hércules para marchar al Vienner de Austria, donde le hicieron una oferta de 40 millones de pesetas, el equipo, no ha vuelto a vencer en su campo del José Rico Pérez, de Alicante. La última victoria fue ante el Sevilla, el día de la despedida del argentino, a finales de enero. A partir de ahí obtuvo un empate ante el Cádiz y tres derrotas.La directiva se resistía a dejar marchar a Kempes, hasta que el propio jugador, supuestamente acuciado por deudas fiscales, amenazó con abandonar el fútbol y España si no le daban la libertad. José Torregrosa, presidente del Hércules, le hizo una oferta que apenas suponía el 20% de lo que ofrecía el Vienner: "Tenía una ficha de siete millones de pesetas al año, la más alta en la historia del Hércules. La compensación por dejarle marchar no fue más que un mal necesario. O lo dejábamos marchar o se retiraba. No había otra alternativa", dice Torregrosa.

Mientras estuvo con el equipo, Kempes logró nueve goles. Aún hoy es el máximo goleador del Hércules esta temporada. El bagaje de sus compañeros quedó tan atrás que un centrocampista, Bakero, tiene que resolver las situaciones ante la meta contraria. De nada valieron las múltiples pruebas a jugadores extranjeros, que no satisfacieron las exigencias. del entrenador. El fichaje del yugoslavo Janjos llegó demasiado tarde.

Desde que Kempes se marchó nórdicos y suramericanos, cuatro en total, estuvieron a prueba. Ninguno agradó al técnico Manolo Villanova. Janjos, el último en probar, se quedó, igual que el argentino Moyano, que tiene la doble nacionalidad, cedido por el Murcia hasta finales de esta temporada.

Junto al Celta, el Hércules es quien menos puntos ha sacado en los desplazamientos: victoria en Vigo y empate ante el Sevilla. En Alicante ha tenido cinco derrotas y cuatro empates; En la segunda vuelta, donde se fraguó el descenso, sólo dos victorias, la del Celta y ante el Sevilla.

El fracaso se inició con los desafortunados fichajes de Antonio Torres, el entrenador con el que comenzó la campaña el Hércules. La debilidad con que se empleó el equipo determinó el cese fulminante del técnico, con quien el Hércules venció la pasada temporada en el Santiago Bernabéu.