Yáñez se adjudica la Semana Catalana con sólo un segundo de ventaja

El ciclista español Felipe Yáñez ha sido el vencedor de la Semana Catalana de Ciclismo, con tan sólo un segundo de diferencia sobre el segundo clasificado, el francés Jean-Claude Bagot. Julián Gorospe, cuarto, fue el segundo español mejor calsificado. El vencedor de la última etapa, entre Mollerussa y Santa Coloma de Gramenet, de 187 kilómetros, fue e¡ belga Eddy Planckaert, que se adjudicó su cuarto triunfo en una prueba en la que las figuras contratadas solamente vinieron a rodarse con vistas a compromisos más importantes.

Yáñez, un ciclista modesto qu durante toda su carrera trabajó ...

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El ciclista español Felipe Yáñez ha sido el vencedor de la Semana Catalana de Ciclismo, con tan sólo un segundo de diferencia sobre el segundo clasificado, el francés Jean-Claude Bagot. Julián Gorospe, cuarto, fue el segundo español mejor calsificado. El vencedor de la última etapa, entre Mollerussa y Santa Coloma de Gramenet, de 187 kilómetros, fue e¡ belga Eddy Planckaert, que se adjudicó su cuarto triunfo en una prueba en la que las figuras contratadas solamente vinieron a rodarse con vistas a compromisos más importantes.

Yáñez, un ciclista modesto qu durante toda su carrera trabajó para los demás, recibió ayer su justo premio, cuando ya está en la recta final de su vida deporti va. A sus 33 años consiguió ante la sorpresa general, adjudicarse una de las carreras mas prestigiosas del calendario español y casi volvió loco de alegría a su director deportivo, Miguel Moreno, que justificó así para la casa Zahor casi toda la tempo rada.Tan sólo un segundo separa ba a Yáñez de Bagot cuando se inició la quinta y definitiva etapa, que no presentaba excesiva dificultades orográficas. En Mo llerussa la incógnita era si el modesto equipo Zahor conseguiría aguantar los presuntos ataques del Fagor, que a la hora de la verdad se quedaron en meros fuegos de artificio.

Fue un colombiano, Carlos Emiro Rodríguez, del equipo Kelme, quien intentó romper la carrera nada más tomarse la sa lida. Rodríguez, mal situado en la clasificación general, sólo per seguía el triunfo parcial de una etapa y por eso nadie se inquietó cuando saltó del pelotón. Carlos Emiro realizó una escapada su¡ cida de 156 kilómetros, que murió en las mismas puertas del Tibidabo. En esas rampas fue don de sufrió un poco Yáñez, porque se quedó solo, sin nadie de su equipo que le pudiera ayudar, porque sus compañeros se habían vaciado para llevarle cómodamente entre el pelotón, que siempre imprimió un ritmo endiablado.

A las puertas de Santa Coloma de Gramenet llegaron destacados Rodríguez Magro y Rooks, que consiguieron 10 segundos de diferencia sobre un grupo de 34 hombres entre los que figuraba el líder. Los jueces de la carrera tomaron los tiempos de estos dos hombres, pero el ganador de la etapa fue el belga Plarickaert, que aprovechó las tres vueltas que debían darse a un circuito urbano y batir al sprint a Federico Etxabe.

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