Ana Benegas

Hermana de Txiki Benegas, cantautora, se presentó anoche en Madrid

Nació hace 27 años en San Sebastián y comenzó a componer y cantar canciones cuando era aún una niña, pero sólo se ha dedicado profesionalmente a ello desde hace tres años. También estudió psicología en las universidades de Barcelona y el País Vasco, aunque no ha ejercido nunca. Hermana de Txiki Benegas, secretario de organización del PSOE, afirma que éste es un hecho que a veces la perjudica para que valoren su trabajo como cantante y compositora, único compromiso que ahora mantiene.

Tiene una mirada tímida y gestos pausados con que acompaña la conversación y se muestra algo nerviosa ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Nació hace 27 años en San Sebastián y comenzó a componer y cantar canciones cuando era aún una niña, pero sólo se ha dedicado profesionalmente a ello desde hace tres años. También estudió psicología en las universidades de Barcelona y el País Vasco, aunque no ha ejercido nunca. Hermana de Txiki Benegas, secretario de organización del PSOE, afirma que éste es un hecho que a veces la perjudica para que valoren su trabajo como cantante y compositora, único compromiso que ahora mantiene.

Tiene una mirada tímida y gestos pausados con que acompaña la conversación y se muestra algo nerviosa ante su presentación profesional en Madrid, donde anoche hizo su primera actuación y donde va a cantar durante el mes de diciembre en varios locales. "El presentarse en Madrid es fundamental para un cantante" dice, "porque, al fin y al cabo, es aquí donde se cuecen todas las cosas del mundo de la canción, están las casas discográficas importantes y la repercusión del trabajo es mayor".A los 15 años ganó el primer premio de un concurso de autores noveles en San Sebastián formando dúo con Juanma Aramburu, a pesar de lo cual se decidió a acabar primero la carrera de Psicología antes de decidirse a cantar profesionalmente. "La carrera me sirvió para hacer algo que me gusta y prepararme, pero cuando acabé vi bien claro que lo que quería hacer era cantar. Los inicios son siempre duros, especialmente en un oficio tan competivivo y haciendo un tipo de música que no es la de moda. Además, el cantar en castellano en el País Vasco no me ha facilitado las cosas; los sellos vascos sólo graban en euskera, y Madrid queda muy lejos".

"El hecho de que alguno de mis hermanos esté muy relacionado con la política, Txiki en el PSOE y Doris en el Movimiento Comunista, ayuda en la medida en que sirve para que hablen de una", continúa, "pero también me perjudica, porque te definen innecesariamente desde el principio, y yo no tengo nada que ver con ellos en ese terreno. Soy cantante y quiero que se me valore como tal, por mi propio trabajo, sin tener en cuenta de quién pueda ser hermana".

Se declara buena oyente de música clásica y admiradora de figuras como Paco Ibáñez, Mikis Theodorakis, Jacques Brel o Mikel Laboa, cantantes que conoció a través de los discos que compraban sus hermanos. "Aunque en mi familia no hay ningún antecedente musical, lo que sí hay es una gran afición. En mi casa se han escuchado siempre cantantes que decían cosas con sus canciones. Mis hermanos mayores compraban los discos y yo los escuchaba, y de ahí me surgió la afición. También hacia la poesía, que es mi otra gran afición. Me gustan poetas como Machado, Hernández o León Felipe, así como la poesía oriental. La poesía y la canción es una forma de expresar lo que sucede a tu alrededor, la forma de explicarse uno mismo cómo ve el mundo".

Para Ana Benegas ser cantautora hoy en día no es una bicoca, aunque estén apareciendo nombres nuevos (Javier Bergia, Enric Arnau, Javier Rubial o Javier Batanero) que están dando un nuevo impulso a un tipo de música que parecía enterrado pero que da muestras de renovada vitalidad: "Tocar en cafés-concierto o en pubs es duro. Pagan poco y se actúa en condiciones no siempre óptimas; y aunque las cosas van mejorando, a veces se siente un cierto desaliento, al ver qué la industria sólo se vuelca con la música más comercial o de moda". Y concluye: "La canción es un arte como otro cualquiera. Lo que debería importar es la calidad y lo que se expresa con lo que se hace, pero no siempre es así".

Archivado En