La mayoría de los sindicatos británicos, a favor de la expulsión de los ingenieros de la Trade Union

Las continuas declaraciones des calificadoras y la amenaza de expulsión del sindicato de ingenieros, se han convertido en los principales temas de debate del congreso de la confederación de sindicatos británicos, Trade Union Congress (TUC), que comenzó ayer en Blackpool.

Los principales líderes de los 100 sindicatos que acuden a este congreso y que representan a unos 10 millones de trabajadores, han estado de acuerdo en calificar de "suicidas" las leyes sindicales aprobadas por el Gobierno de la primera ministra británica, Margaret Thatcher, al mismo tiempo que anunciaban su decidid...

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Las continuas declaraciones des calificadoras y la amenaza de expulsión del sindicato de ingenieros, se han convertido en los principales temas de debate del congreso de la confederación de sindicatos británicos, Trade Union Congress (TUC), que comenzó ayer en Blackpool.

Los principales líderes de los 100 sindicatos que acuden a este congreso y que representan a unos 10 millones de trabajadores, han estado de acuerdo en calificar de "suicidas" las leyes sindicales aprobadas por el Gobierno de la primera ministra británica, Margaret Thatcher, al mismo tiempo que anunciaban su decidida postura de no cooperación con la nueva legislación laboral del Gobierno que calificaron como "partisana y anti-sindical".

La mayoría de los congresistas se mostró favorable a la expiulsión de la Trade Union Congress del sindicato de ingenieros -segundo en importancia con un millón de afiliados- por haber aceptado dinero del Gobierno para organizar, vía postal, los votos de sus afiliados. Ayer estaba prevista una reunión de los representantes de este sindicato para decidir su actitud ante la sesión que hoy mantendrá el congreso y en la que el ejecutivo propondrá su expulsión.

Ron Tood, representante del sindicato de transportes, el más importante, calificó ayer de "desertores" a los líderes del sindicato de ingenieros. Sin embargo, Eric Hammond, líder del sindicato de electricistas que tiene más de 350.000 afiliados, afirmó ayer a los delegados del congreso que "si se produce la expulsión de los ingenieros nosotros nos retiraremos de este congreso".

Hammond añadió duras críticas a la gestión de la TUC y afirmó que "yo no creo que estas divisiones sean fruto de cosas momentáneas sino que creo que responden a una clara política de suicidio del movimento sindical".

Otras divisiones

La casi segura expulsión del sindicato de ingenieros y la consiguiente retirada de los representantes sindicales de los electricistas abrirían la crisis más importante de todo este siglo en el movimiento sindical británico. Los analistas aseguran que la escición de ingenieros y electricistas podría ser seguida de otras divisiones que formarían una TUC alternativa dirigida por líderes mineros.El movimiento sindical británico se ha caracterizado por la solidaridad entre las distintas organizaciones, como se demostró en la pasada huelga de mineros en la que éstos recibieron apoyo de otros sindicatos. Estos enfrentamientos en el seno de la Trade Union Congress se producen en un momento en que el número de afiliados desciende considerablemente, según los líderes sindicales a causa del constante aumento del desempleo.

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