TVE encarga a una empresa española la producción de una serie de dibujos

Televisión Española ha encargado a la empresa barcelonesa Equip la producción y realización de una serie de dibujos animados titulada Mofli, el último koala, de 26 capítulos, y con un presupuesto aproximado de 480 millones de pesetas. El encargo supone romper la tradicional presencia en este sector de japoneses y norteamericanos.

"La calidad de los animadores españoles está reconocida inter- nacionalmente, pero sólo nos dejan demostrarla a través de los spots publicitarios. Todos los encargos grandes de organismos públicos, como RTVE, eran siempre para empresas extranjeras, sobre todo p...

Televisión Española ha encargado a la empresa barcelonesa Equip la producción y realización de una serie de dibujos animados titulada Mofli, el último koala, de 26 capítulos, y con un presupuesto aproximado de 480 millones de pesetas. El encargo supone romper la tradicional presencia en este sector de japoneses y norteamericanos.

"La calidad de los animadores españoles está reconocida inter- nacionalmente, pero sólo nos dejan demostrarla a través de los spots publicitarios. Todos los encargos grandes de organismos públicos, como RTVE, eran siempre para empresas extranjeras, sobre todo para los japonesas, que ofrecen los mejorels precios a costa de haber degradado las técnicas de animación y es tandarizado su lenguaje". La opinión es de Jordi Amorós, que asume la dirección y supervisión general de la serie Mofli, el último koala. Amorós señala esperanzado los cambios de orientación del mercado. "Todo el mundo está cansado de esos dibujitos que son siempre iguales, de esas caras que se repiten serie tras serie, de la pobreza técnica y de imaginación de unos programas que nosotros podemos mejorar".Como demostración irrefutable del mayor cuidado de los animadores españoles hay datos cuantitativos. "En las series japonesas lo más frecuente es que el promedio de dibujos por mi nuto de proyección sea de unos 100. En Equip trabajamos con un promedio que se sitúa entre los 500 y 600. Son 12 dibujos por segundo, lo que se traduce en unas posibilidades de movimiento mayores".

Las televisiones, con su enorme consumo de imágenes enlatadas, son las destinatarias de la práctica totalidad de los dibujos animados que se hacen en el mundo. "Por eso, porque la demanda es enorme, 480 millones de presupuesto no es ningún disparate. Claro, que hay que ofrecer calidad". En la mente de todos está la adaptación de Don Quijote, y el fracaso que se diría amenaza a la proyectada serie sobre el descubrimiento de América. "Querer vender a Suramérica un relato en el que los conquistadores son los héroes positivos de la historia es muy difícil. Lo mejor es elegir temas -que puedan desarrollarse en cualquier lugar, que no sean sólo hispánicos". Y de ahí el koala y Australia. Y el situar la acción en 1997. Y el que los personajes corran medio mundo y el que haya personajes franceses, italianos o americanos.

Para septiembre de 1986 está prevista la emisión del primer capítulo de Mofli, el último koala.

La gente de Equip, que hasta ahora había tenido que conformarse con el prestigio de numerosos premios internacionales, con traba ar en la sombra para Hanna-Barberá, Bill Meléndez y dar vida a los peanuts, picapiedras, lucky-lukes..., se dispone a dar el gran salto.