Dormirse sin clasificación

La Vuelta Ciclista a España, que indudablemente mejora en su aspecto deportivo, parece decidida a no evitar esos detalles que la siguen relegando a una carrera de segunda categoría en el plano internacional.La Vuelta siempre ha sido, a ojos de los periodistas extranjeros, una oportunidad de hacer un recorrido turístico por malas carreteras. Acudían a una prueba por etapas regularmente mal organizada en comparación con las europeas y en la que se divertían comprobando cómo los ciclistas nacionales se las apañaban para que ganara casi siempre un corredor extranjero. Entre las peculiaridades de l...

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La Vuelta Ciclista a España, que indudablemente mejora en su aspecto deportivo, parece decidida a no evitar esos detalles que la siguen relegando a una carrera de segunda categoría en el plano internacional.La Vuelta siempre ha sido, a ojos de los periodistas extranjeros, una oportunidad de hacer un recorrido turístico por malas carreteras. Acudían a una prueba por etapas regularmente mal organizada en comparación con las europeas y en la que se divertían comprobando cómo los ciclistas nacionales se las apañaban para que ganara casi siempre un corredor extranjero. Entre las peculiaridades de lo que consideraban una prueba algo folclórica estaba siempre lo dificil que resultaba en España hacer las clasificaciones.

Más información

Cuando pululan por la cuneta automóviles anunciando la llegada de la informática a la Vuelta, resulta que las clasificaciones se siguen haciendo a mano o se transmiten boca a boca. Éste es el motivo de que, para muchos medios de información, sea casi imposible saber cómo está la clasificación hasta muy avanzada la noche. La mayoría de los corredores se acuesta en la cama sin saber qué posición ocupa.

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