Cuyás remodela el CDS para consolidar su posición

Próximos nombramientos en las áreas de medicina deportiva, servicios jurídicos y en la dirección del Instituto de Ciencias para el Deporte completarán la amplia remodelación que afecta al Consejo Superior de Deportes (CSD) y que ha dado lugar a diversas interpretaciones sobre su causalidad. Oficialmente, estos cambios afectan a la apertura de una nueva etapa de trabajo en dicho organismo, centrada en la conclusión de varios objetivos.Políticamente, estos cambios se interpretan como una confusa maniobra por la que Romá Cuyás pretende consolidarse como secretario de Estado para el Deporte, a...

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Próximos nombramientos en las áreas de medicina deportiva, servicios jurídicos y en la dirección del Instituto de Ciencias para el Deporte completarán la amplia remodelación que afecta al Consejo Superior de Deportes (CSD) y que ha dado lugar a diversas interpretaciones sobre su causalidad. Oficialmente, estos cambios afectan a la apertura de una nueva etapa de trabajo en dicho organismo, centrada en la conclusión de varios objetivos.Políticamente, estos cambios se interpretan como una confusa maniobra por la que Romá Cuyás pretende consolidarse como secretario de Estado para el Deporte, a la vista de los numerosos rumores que le daban por próximamente destituido.

Cambio importante fue la destitución de Celso Nores como secretario general, con categoría de director general, por Fernando Navarro, y que, en palabras de Romá Cuyás, afectaba a una remodelación de los servicios jurídicos. Fernando Navarro está considerado como hombre de Narcís Serra, ministro al que en algunos sectores del PSOE se le llama de Defensa y Deportes. Fernando Navarro ocupará un puesto central en el organigrama del CSD, que reconoce implícitamente su fracaso en cuestiones jurídicas, unos servicios para los que habitualmente tuvieron que recurrir a personas ajenas, lo que ha ocasionado grandes problemas a la hora de la redacción de ciertos decretos. Los servicios jurídicos serán, pues, reformados, por lo que se estima como próxima la destitución de hombres como Santiago Corredoira y San Román, mantenidos por Romá Cuyás por razones estratégicas de difícil explicación, aun cuando no prestaban ningún tipo de servicio.

Políticamente, sectores del PSOE han entendido que Javier Solana, ministro de Cultura, se ha dejado colocar a un nuevo hombre de Serra, que empiezan a dominar los puestos claves del CSD en un momento en el que se especulaba con un acercamiento de Solana a los hombres del PSOE, y más concretamente a Daniel Romero, cuyo protagonismo en la pasada huelga de futbolistas, incluidas sus apariciones en TVE, se comentaba estaba inducido por Solana. Romá Cuyás era considerado políticamente muerto tras su actuación en el Comité Olímpico Español, que contribuyó a deteriorar, por extensión, la imagen del Gobierno en el área deportiva. Daniel Romero obtuvo permiso para realizar ciertos cambios que afectan a la alta competición (se prepara un plan de cuatro y ocho año! para el que serán llamadas en primer lugar. una por una, las federaciones olímpicas), a los servicios de medicina deportiva y al nombramiento del director del Instituto de Ciencías del Deporte. Sin embargo, estos cambios han ido acompañados de otros, con los que Romá Cuyás intenta reforzar su situación.

Celso Nores, como secretario general, gozaba de escasa confianza. Su actuación se consideraba poco eficaz y daba pie a errores burocráticos. El último era la negativa a autorizar la Asociación de Clubes de Balonmano "por no tener objetivos deportivos", como reía su explicación, cuando dicha asociación había copiado los estatutos de la de baloncesto, que está inscrita y ha merecido ya varias sentencias favorables.

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