Melina Mercouri

ministra griega de Cultura, y Theodoros Pangalos, secretario de Exteriores para la CEE, han sido convocados para pronunciarse ante un jurado sobre la supuesta obscenidad de una obra del marqués de Sade. Su presencia fue requerida por el abogado defensor de Thedoros Banousis, propietario de la editorial Exandas, que en el verano de 1982 editó La filosofía en el boudoir, del marqués de Sade. Poco después, el editor fue acusado de imprimir y distribuir material pornográfico, y fue condenado por ello. Durante el primer juicio, el único testigo del fiscal fue un policía, que de...

ministra griega de Cultura, y Theodoros Pangalos, secretario de Exteriores para la CEE, han sido convocados para pronunciarse ante un jurado sobre la supuesta obscenidad de una obra del marqués de Sade. Su presencia fue requerida por el abogado defensor de Thedoros Banousis, propietario de la editorial Exandas, que en el verano de 1982 editó La filosofía en el boudoir, del marqués de Sade. Poco después, el editor fue acusado de imprimir y distribuir material pornográfico, y fue condenado por ello. Durante el primer juicio, el único testigo del fiscal fue un policía, que declaró haber leído tan sólo fragmentos de la obra. En esta segunda vista se decidirá si la edición de La filosofía en el boudoir debe ser conservada como una obra de arte o destruida por su carácter obsceno.