Luis Doreste y Roberto Molina, campeones en clase 470 de vela a falta de una regata

ENVIADO ESPECIAL, Los regatistas canarios Luis Doreste y Roberto Molina, participantes en las regatas olímpicas en la clase 470, consiguieron en la penúltima regata la primera medalla de oro española en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. La vela española confirmó que es un deporte con campeones olímpicos, alcanzando medallas en los tres últimos Juegos. Esta medalla de oro es la tercera que obtienen deportistas españolas en la historia de los Juegos de Verano y la cuarta si se cuenta la obtenida por Francisco Fernández Ochoa en los Juegos de Invierno de Sapporo. La medalla será entregada en l...

ENVIADO ESPECIAL, Los regatistas canarios Luis Doreste y Roberto Molina, participantes en las regatas olímpicas en la clase 470, consiguieron en la penúltima regata la primera medalla de oro española en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. La vela española confirmó que es un deporte con campeones olímpicos, alcanzando medallas en los tres últimos Juegos. Esta medalla de oro es la tercera que obtienen deportistas españolas en la historia de los Juegos de Verano y la cuarta si se cuenta la obtenida por Francisco Fernández Ochoa en los Juegos de Invierno de Sapporo. La medalla será entregada en la tarde del jueves (hora de Los Ángeles)

Luis Doreste y su tripulante, Roberto Molina, no necesitaron ni siquiera participar en la séptima y última regata, celebrada en la jornada del miércoles, al haber demostrado desde la sexta regata, en la tarde del martes, que eran los mejores en la clase 470, por delante de sus rivales más di rectos formados por los equipos de Estados Unidos, Italia, Francia y Nueva Zelanda. "El miércoles lo dedicaremos a recoger el barco", dijo, lleno de satisfacción, Luis Doreste, rodeado de fotógrafos, cámaras de televisión y periodistas.La prensa internacional se interesaba, en Long Beaclil- por la victoria de Luis Doreste, cuyo nombre no figuraba en ninguna de las listas de favoritos antes de iniciar se los Juegos Olímpicos. Doreste y Molina, con la calma de los triunfadores, fueron respondiendo a las preguntas. "Llevamos entrenando cuatro años en equipo", dijo Do reste. "No", añadió, "no conocía mos las aguas de Long Beach, sólo pudimos prepararnos unos siete días, debido a retrasos en la horno logación del barco".¿Cuál fue la clave de la victoria? "Probablemente la existencia e vientos flojos", apuntó Doreste. "La mayoría de competidores llegaron preparados para vientos mas tuertes". Doreste y Molina recordaban tras su triunfo que "aspirábamos a medalla, pero nos parecía difícil conseguir el oro y sobre todo faltando aún una regata".

Pero la regularidad de Luis Doreste logró sumar sólo 18,70 puntos, imposible de superar por sus inmediatos seguidores, el francés Thierry Peponnet (37,70), o el estadounidense Stephen Benjamin (40 puntos). Para Doreste, no fue necesario apurar el último día de regata. El oro -cuya medalla le entregarán en la tarde de hoy, jueves, en el acto oficial de clausura- había llegado antes del minuto final. Antes de una regata mas, al estilo de los grandes campeones.

Una táctica conservadora

En la regata del pasado martes (madrugada del miércoles en España), la que aportó la medalla de oro, Luis Doreste practicó una táctica conservadora, para no perder lo conseguido durante cinco días, con resultados consecutivos en el tercer puesto, primero, quinto, segundo, primero y noveno. "La regata de hoy", dijo Doreste, "era un poco conservar la ventaja que llevamos. Tuvimos gran cuidado en no cometer ningún error que pudiera descalificarnos, y siempre mantuvimos bajo control al equipo de E E UU y de Italia, nuestros principales adversarios".

El norteamericano Stephen Benjamin intentó acosar al equipo de Doreste y Molina desde el primer momento de salida de la sexta regata, última y triunfal para Doreste. En la jornada del, lunes, en la quinta regata, Benjamin protestó porque Doreste habla pedido un chaleco de peso, dentro del tiempo reglamentario de los 10 minutos que preceden ala salida. Al final, la maniobra táctica del estadounidense no prosperó, y Luis Doreste no sufrió ninguna descalificación.

Para el vicepresidente de la Federación Española de Vela y jefe, del equipo, Fernando Bolín, así como para el entrenador, José Luis Benavides, la medalla de oro de Los Ángeles es la prueba real de que "hay una buena base para la vela en España". "En los tres últimos Juegos", dice Bolín, "hemos logrado medalla; en 1976, con Antonio Gorostegui; en Montreal (plata), y en 1980, en Moscú, con Alejandro Abascal (oro). Personalmente siento una gran satisfacción de haber sido el jefe de equipo en los tres Juegos Olímpicos disputados".

Fallaron los favoritos

El triunfo de Luis, Doreste y Roberto Molina era motivo de satisfacción para todos los componentes del equipo español en la pálida tarde de California. Pero no lograba eclipsar el recuerdo de que los favoritos (Gorostegui y Abascal) sólo obtenían resultados medianos en las clasificaciones de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. Como valoración global de la actuación española, Bolín cree "que les fallaron un poco los nervios en los primeros días, como se ha demostrado con la recuperación, sobre todo para Gorostegui, en las últimas jornadas".

Los españoles no fueron los únicos que no regatearon el último día. Lo mismo hicieron. los navegantes neozelaneses- Rex Sellers (34 años) y Chris Timms (37 años), medalla de oro en la clase Tornado; y los norteamericanos Robbie Haines (30 años), Roda Davis (29 años) y Ed Trevelyan (29 años), medalla de oro en Soling.