Miguel Muñoz, preocupado por la apatía, el nerviosismo y la falta de garra

Miguel Muñoz reconoció que se encuentra seriamente preocupado por la apatía, el nerviosismo y la falta de garra mostrada por su conjunto. "Tendremos que hablar mucho para hallar la solución. El resultado ha sido lo único bueno. He visto a los jugadores agarrotados y nerviosos, en una actuación similar a la igualada inaugural en el último Mundial frente a Honduras". El seleccionador aseguró que tenía la sensación de que no se intentaba la jugada por miedo a fallarla. Muñoz admitió que "este resultado nos obliga a empezar de nuevo".Gallego fue el jugador más crítico. "Nos hemos contagiado del j...

Miguel Muñoz reconoció que se encuentra seriamente preocupado por la apatía, el nerviosismo y la falta de garra mostrada por su conjunto. "Tendremos que hablar mucho para hallar la solución. El resultado ha sido lo único bueno. He visto a los jugadores agarrotados y nerviosos, en una actuación similar a la igualada inaugural en el último Mundial frente a Honduras". El seleccionador aseguró que tenía la sensación de que no se intentaba la jugada por miedo a fallarla. Muñoz admitió que "este resultado nos obliga a empezar de nuevo".Gallego fue el jugador más crítico. "Nos hemos contagiado del juego de los rumanos, que tan sólo querían hacer correr el reloj y no arriesgaban nada por la victoria". Al preguntársele si los centrocampistas habían estado grises, el Soso comentó que "nosotros sólo podemos pasar el balón al jugador desmarcado y lo que no debemos es pasárselo para meterle en un lío. Esta noche nos ha quemado en las botas". En torno al futuro, afirmó que "tal como hemos jugado hoy, con un fútbol anodino, sin brillantez, con escasísimas ideas, tenemos poco que hacer". Esta misma idea era compartida por Santillana. "Jugamos fatal. Nadie puede ser disculpado. He estado solo arriba porque no ligábamos ni una jugada de ataque".

Mircea Lucescu, seleccionador rumano, comentó que España le había defraudado. "Esperaba mucho más de ella, pero se ha limitado a defenderse en espera del contragolpe. La pena fue ese penalti, que nació de un estúpido error". En torno al conformismo de su equipo, manifestó que "me hubiera gustado que los míos hubieran arriesgado para ganar". Boloni, el cerebro, dijo que "jugamos lentos, sí, pero porque muchos de mis compañeros carecen de experiencia".