Connors dio una lección de tenis a Sánchez

La lluvia convirtió un día más Roland Garros en una pequeña réplica de Wimbledon. Los partidos comenzaron, pero pocos terminaron. Nubes tormentosas sobrevolaron París y las instalaciones de Roland Garros parecían tener un imán para atraer a las más negras. Sólo el checo Ivan Lendl, el ecuatoriano Andrés Gómez y el norteamericano Jimmy Connors fueron capaces de acabar su trabajo. Lendl, superó al sueco Jarryd (64, 6-0 y 64), Gómez al otro sueco, Gunnarson (6-3, 6-1 y 6-1), mientras Connors derrotaba al campeón de España, Emilio Sánchez, por 64, 6-1 y 6-1. Los vencedores de ayer, junto a John Mc...

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La lluvia convirtió un día más Roland Garros en una pequeña réplica de Wimbledon. Los partidos comenzaron, pero pocos terminaron. Nubes tormentosas sobrevolaron París y las instalaciones de Roland Garros parecían tener un imán para atraer a las más negras. Sólo el checo Ivan Lendl, el ecuatoriano Andrés Gómez y el norteamericano Jimmy Connors fueron capaces de acabar su trabajo. Lendl, superó al sueco Jarryd (64, 6-0 y 64), Gómez al otro sueco, Gunnarson (6-3, 6-1 y 6-1), mientras Connors derrotaba al campeón de España, Emilio Sánchez, por 64, 6-1 y 6-1. Los vencedores de ayer, junto a John McEnroe, Jimmy Arias y Henrik Sundstrom, ya están clasificados para disputar los cuartos de final.

El español Emilio Sánchez, que a los 19 años se convirtió, en 1983, en el campeón de España más joven de la historia, fue eliminado ayer en los octavos de final del torneo de Roland Garros de tenis, al perder frente al estadounidense Jimmy Connors, por 6-4, 6-1 y 6-1. El partido duró realmente un set, el primero. Luego, como dijo el propio Emilio Sánchez, "me dejó hecho polvo. Cada vez que intentaba un golpe, él lo repetía mejor". El español demostró tener tenis suficiente para estar entre los mejores, pero también le faltó la serenidad y tranquilidad que sólo muchos partidos pueden darle."La verdad es que fui bastante de cráneo", reconoció Sánchez, tras estar una hora y 45 minutos en la pista central de Roland Garros, frente a uno de los monstruos del tenis, el estadounidense Connors. Y, sin embargo, el que parecía ir de cráneo durante los primeros juegos del partido fue Jimbo. Sánchez, jugando suelto, con confianza y con golpes largos y durísimos, asustó a los aún adormecidos espectadores de Roland Garros, colocándose 3-0 arriba y disponiendo de cuatro bolas para el 4-0, con servicio de Connors. "Estaba bien despierto", explicó luego Connors, "pero me sucedió lo mismo que ante Jaite. Me cuesta entrar en los partidos cuando me enfrento a jugadores jóvenes a los que desconozco".

El despertar de Connors

Connors se despertó pronto. De 4-1 en su contra pasó a ganar el primer set por 6-4 y dominar el segundo por 5-0. Connors ganó 10 juegos consecutivos, ya totalmente despierto, y Sánchez se había convertido en un sonámbulo en la pista. "Tuve un problema mental", dijo el español, "estaba pensando que podía ganar el primer set y, de repente, me vi perdiendo por 50 en el segundo. Creo que fue un problema de táctica. Todo el mundo me había dicho que el drive de Connors era su golpe más flojo, y a mí me ha ganado casi todos los puntos con ese golpe".

Lo cierto es que Emilio Sánchez parece ser muy joven aún para soportar la constante presión de Jimmy Connors. El partido fue una lección magistral de un catedrático del tenis a un alumno aventajado, pero excesivamente pacífico, al que además se le descubrieron las chuletas. Su entrenador, Pato Álvarez, le hizo los gestos de cómo debía jugar demasiado cerca del árbitro, como ya sucediera en la ronda anterior.

A Emilio Sánchez se le sancionó con una amonestación en el octavo juego del primer set, lo que le dejó otra vez solo en el examen. Presionando constantemente, Connors evitó que Sánchez entrase en el partido. Connors siempre juega con un segundo de adelanto sobre su rival, y ese segundo le impidió ayer a Emilio golpear tranquilamente con su drive o ensayar unrevés cruzado. "Estaba acelerado, como perdido en la pista", dijo Sánchez. Además, parecía tener ganas de marcharse.

El alumno Emilio, sin embargo, ha pasado su reválida en este Roland Garros. Aprobó con sobresaliente un examen muy dificil, el que le planteó el checo Tomas Smid -es "la victoria más importante de mi vida"- y se ganó la simpatía de todos con un carácter abierto que le hacía sonreír cuando, en la sala de prensa, contestaba con un tímido "just a little", cuando la preguntaban si sabía hablar en inglés. "Ahora me vuelvo a Barcelona. Tengo que tallarme para el servicio militar". Son los planes inmediatos de Emilio. Luego, "jugar en Wimbledon porque, aunque sé que tengo poco que hacer, Wimbledon es Wimbledon". El juego de Emilio Sánchez ha sido elogiado por todos en París. Ahora habrá que saber si ha tomado buenos apuntes de la clase que ayer le dio Connors. ,

Cuando entró en la ducha tras la primera interrupción que sufrió su partido, Ivan Lendl ya podía estar relajado. Gariaba por 6-4 y 6-0. Su rival, el sueco Jarryd, es uno de los hombres que mejor resta, pero su juego carece de la fuerza y consistencia que posee a raudales Lendl. El checo acabó la tercera manga con un 6-4. Ivan Lendl dijo que "estoy en buena forma. No me importa que no se hable dle mi como favorito". Lendl llega a cuartos de final sin haber perdido un solo set. El dato no representa ninguna sorpresa. Lendl suele jugar muy bien hasta el día decisivo. Entonces, indefectiblemente y como ha sucedido en los últimos años, falla estrepitosamente.

El Irregular Gómez

Lendl se encontrará en cuartos de final con el ecuatoriano Andrés Gómez, que está jugan do espectacularmente. Ante rivales más difíciles que Lendl Gómez tampoco ha cedido un set. Ayer ganó al sueco Gunnarson por 6-3, 6-1 y 6-3. El problema de Gómez es su irregularidad. Ante Lendl, Gómez es capaz de lo mejor, y también de lo peor.

Uno de los más agresivos, sin embargo, tiene un difícil papel. Yannick Noah, el actual campeón, perdió ayer el primer set ante el veterano húngaro Balasz Taroczy por 6-3. Noah se recuperó en el segundo set, que ganó por 6-2, pero, cuando dominaba 1-0 en la tercera manga, apareció la segunda tanda de lluvia del día, que fue la que provocó la suspensión del único partido de cuartos femeninos, entre la checa Hanna Mandlikova y la dieciseisañera Melissa Brown. Esta segunda tanda de lluvia, mucho más violenta, acabó con la jornada. Mandlikova dominaba por 6-1 y 2-3.

El último español que queda en Roland Garros, Joan Aguilera, debería jugar hoy ante el sueco Mats Wilander. Las previsiones meteorológicas anuncian cielo nublado con posibilidad de lluvia. Pero aquí nunca se sabe.

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