Tres reclusos expertos en fugas se escaparon el viernes de la cárcel de seguridad de Alcalá de Henares

Tres reclusos considerados como muy peligrosos por la policía y las autoridades penitenciarías escaparon el Viernes Santo por la noche de la prisión de máxima seguridad de Alcalá-Meco, en Madrid. La fuga se produjo minutos antes del recuento de retreta de las 21.30 horas, que señala el momento de volver a las celdas para dormir. Uno de los huidos es Rafael Bueno, que el pasado mes de octubre fue liberado del Hospital Provincial de Burgos por dos miembros de su banda que, asesinaron a dos de los policías nacionales que le custodiaban.Bueno fue detenido por última vez en Barcelona, a finales de ...

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Tres reclusos considerados como muy peligrosos por la policía y las autoridades penitenciarías escaparon el Viernes Santo por la noche de la prisión de máxima seguridad de Alcalá-Meco, en Madrid. La fuga se produjo minutos antes del recuento de retreta de las 21.30 horas, que señala el momento de volver a las celdas para dormir. Uno de los huidos es Rafael Bueno, que el pasado mes de octubre fue liberado del Hospital Provincial de Burgos por dos miembros de su banda que, asesinaron a dos de los policías nacionales que le custodiaban.Bueno fue detenido por última vez en Barcelona, a finales de noviembre, y días después se le acusó de participar en la muerte de tres delincuentes catalanes en un ajuste de cuentas. Los otros dos fugados, Antonio Álvarez y Antonio Retuerta, se habían escapado en junio de 1983 de la prisión de Carabanchel por un procedimiento muy similar al empleado el pasado viernes.

Los fugitivos arrancaron el inodoro de una celda, se deslizaron por una galería de servicio hasta un sótano de la prisión, y allí., con dos pistolas simuladas que habían confeccionado a base de jabón y tubos metálicos pintados con tinta china, redujeron a tres funcionarios.

Los reclusos, vestidos dos de ellos con uniformes de guardianes y otro con un mono, se acercaron a las cocinas generales y salieron al campo por una puerta destinada a la introducción de alimentos, sin que los policías nacionales de guardia sospecharan de ellos.

Fuentes de la Dirección General de Policía informaron ayer que no disponían de pista alguna para la localización de los fugitivos. Las mismas fuentes manifestaron asimismo su malestar con los responsables de las instituciones penitenciarias, que, en su opinión, debían haber adoptado mayores medidas de control con los tres presos fugados el viernes, y en particular con Rafael Bueno. Página 13

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