Fotonoticia:

Una chaqueta a la medida.

La imagen recoge el instante en que Severiano Ballesteros ayuda al estadounidense Ben Crenshaw a ponerse la chaqueta verde a la medida del vencedor en el Masters de golf de Augusta. A sus 32 años de edad y en su 13ª intervención en el mismo, Crenshaw consiguió el domingo, en la cuarta y última vuelta, desbancar a su compatriota Tom Kite y adjudicarse su primera gran victoria como profesional. Crenshaw totalizó 277 golpes -67, 72, 70 y 68- y fue líder al término de la primera jornada, cuando incluso se permitió bromear con el detalle de que "el 13 es mi número favorito"; una especie de premonic...

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La imagen recoge el instante en que Severiano Ballesteros ayuda al estadounidense Ben Crenshaw a ponerse la chaqueta verde a la medida del vencedor en el Masters de golf de Augusta. A sus 32 años de edad y en su 13ª intervención en el mismo, Crenshaw consiguió el domingo, en la cuarta y última vuelta, desbancar a su compatriota Tom Kite y adjudicarse su primera gran victoria como profesional. Crenshaw totalizó 277 golpes -67, 72, 70 y 68- y fue líder al término de la primera jornada, cuando incluso se permitió bromear con el detalle de que "el 13 es mi número favorito"; una especie de premonición, pues. "Antes que nada, felicidades y bienvenido a nuestro club", le dijo Ballesteros, triunfador en la pasada edición de este torneo, en la que Crenshaw, como en la de 1976, se clasificó segundo. Su premio, ahora, fue de 108.000 dólares -algo más de 16 millones de pesetas. Seve, por su parte, se negó a hacer declaraciones a los periodistas, incluidos los enviados especiales españoles, después de su fracaso en esta oportunidad, ya que ni siquiera consiguió clasificarse para la fase final.

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