La Copa del Mundo no rebaja el calendario, pese a los Juegos Olímpicos de Invierno

La Copa del Mundo de Esquí Alpino, por segunda vez consecutiva en su historia, no comenzará esta temporada en la estación francesa de Val d'Isere, lugar tradicional. A causa de problemas con televisión, la localidad yugoslava de Kranjska Gora será los días 30 de noviembre y 1 de diciembre escenario de dos eslálom, masculino y femenino, primeras carreras de un calendario, que a pesar de ser interrumpido por los Juegos Olímpicos de Invierno (Sarajevo, del 8 al 19 de febrero), tendrá el mismo número de competiciones que la temporada pasada. La lucha se presenta abierta para destronar a los dos úl...

La Copa del Mundo de Esquí Alpino, por segunda vez consecutiva en su historia, no comenzará esta temporada en la estación francesa de Val d'Isere, lugar tradicional. A causa de problemas con televisión, la localidad yugoslava de Kranjska Gora será los días 30 de noviembre y 1 de diciembre escenario de dos eslálom, masculino y femenino, primeras carreras de un calendario, que a pesar de ser interrumpido por los Juegos Olímpicos de Invierno (Sarajevo, del 8 al 19 de febrero), tendrá el mismo número de competiciones que la temporada pasada. La lucha se presenta abierta para destronar a los dos últimos vencedores, los norteamericanos Tamara Mc Kinney y Phil Mahre.Las primeras pruebas importantes se celebrarán el 21 de noviembre, en Bormio (Italia), con las denominadas Series Mundiales. Los supergigantes, invento de la Federación Internación de Esquí (FIS), para dar mayor espectacularidad a la Copa del Mundo, se seguirán disputando y puntuarán igual que los gigantes. Como viene siendo habitual en los últimos años -se incorporó, precisamente, al calendario con la idea de crear espectáculo para atraer a los aficionados-, la última prueba será otro eslálom paralelo, para hombres y damas, en Oslo, puntuable sólo para la clasificación por equipos.

De momento, los equipos nacionales están terminando de poner a punto a sus esquiadores con el fin de hacer frente a esta apretada temporada. Los actuales campeones, los norteamericanos Phil Mahre y Tamara Mc Kinney, tendrán que emplearse a fondo para volver a obtener la copa de cristal. Nuevamente, uno de los grandes rivales del norteamericano será el sueco Ingernmar Stenmark, aunque no tenga opción a conseguir la Copa del Mundo ya que no participa en los descensos. En mujeres, la mayor aspirante será la suiza Erika Hess, ganadora de la Copa del Mundo 1981-82, que tratará de recuperar sus laureles. El equipo helvético, sin embargo, contará con una importante baja al haberse retirado de la competición Doris de Agostini, campeona de descenso en la última edición, y dedicada ahora a la publicidad.