Martina Navratilova consigue, por fin, el Open de Estados Unidos de tenis

Martina Navratilova rompió ayer su maleficio y ganó el título del Open de Estados Unidos al derrotar en la final femenina a Chris Evert-Lloyd por 6-1 y 6-3. Martina parecía destinada a no ganar nunca este torneo, como el sueco Borg. Pero ayer se acabó la historia. Ganó no sólo el título, sino también 620.000 dólares (93 millones de pesetas) en premios, 120.000 del Open, y 500.000 que recibirá por un acuerdo previo con una firma de ropa interior.

Martina alzó los brazos, saludó a Chris, que golpeó su cabeza con la raqueta cariñosamente, y se dirigió hacia la esquina, donde estaban sus am...

Martina Navratilova rompió ayer su maleficio y ganó el título del Open de Estados Unidos al derrotar en la final femenina a Chris Evert-Lloyd por 6-1 y 6-3. Martina parecía destinada a no ganar nunca este torneo, como el sueco Borg. Pero ayer se acabó la historia. Ganó no sólo el título, sino también 620.000 dólares (93 millones de pesetas) en premios, 120.000 del Open, y 500.000 que recibirá por un acuerdo previo con una firma de ropa interior.

Martina alzó los brazos, saludó a Chris, que golpeó su cabeza con la raqueta cariñosamente, y se dirigió hacia la esquina, donde estaban sus amigos. Los saludó uno tras otro, al estilo americano, golpeándose mutuamente la palma de la mano. Había acabado, en 63 minutos, con ese maleficio que le había impedido ganar el Open de Estados Unidos. Era el único torneo del Grand Slam que aún no había ganado. Martina estaba hambrienta del título. Y, desde el primer momento en la pista, ella misma se animaba golpeándose continuamente en el muslo con la mano. La victoria de Navratilova fue relativamente fácil. En sólo 22 minutos, subiendo constantemente a la red y sirviendo muy bien, Martina ganó el primer set. Chris nunca entró en el partido. "No he jugado bien", explicó, "ha sido uno de mis peores encuentros, en una final del Grand Slam". Chris no acertó a superar a su rival en la red: "Si le lanzaba bolas hacia donde ella estaba, en un 90% yo perdía el punto. Hoy no he acertado en los lobs y en los passhingshot. Martina nunca me ha dejado entrar en juego".Quizá también influyó la diferencia en la ambicion de ambas jugadoras. Chris, que ha ganado seis veces este torneo, reconoció: "He jugado menos motivada que Martina. Ella tenía mucho más que ganar hoy". Martina sólo tuvo problemas en el segundo set. Chris Evert-Lloyd le rompió el servicio y se puso por delante, por primera vez, 3 a 2. Pero fue entonces cuando se acabó el partido. Navratilova ganó cuatro juegos consecutivos, el set, el partido, el torneo y el dinero "Ha sido el mejor triunfo de mi vida. Mucho más que el primer torneo de Wimble:don que gané Ahora, con casi 27 años, valoro mucho más este triunfo porque se lo que representa". Martina estalló en lágrimas de alegría cuando se le preguntó qué sentía al ganar el Open de su país. Nav ratilova es norteamericana desde hace sólo dos años, cuando le fue concedida esta nacionalidad, seis años después de exiliarse de Checoslovaquia.

"He esperado esto durante mucho tiempo", dijo Martina "He trabajado muy duro durante dos años para ganar el Flushing Meadow. El dinero no es nada para mí. No se puede comprar el Open de Estados Unidos. Navratilova, que piensa estar influyendo en los jóvenes "que juegan ahora de una forma más agresiva", reconoció haber recibido la influencia de tres tenistas: "Billie Jean King, Margaret Court, la última mujer que ganó el Grand Slam y, sobre todo, Rod Laver".