Escuredo y De la Borbolla controlan la nueva ejecutiva del partido socialista de Sevilla
La nueva ejecutiva provincial de Sevilla del PSOE, elegida anteanoche en el transcurso de un congreso extraordinario, refleja fielmente el triunfo de la estrecha colaboración iniciada en 1982 entre el secretario regional socialista, José Rodríguez de la Borbolla y el presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo, después de varios años de enfrentamientos entre ambos a propósito de sus concepciones del andalucismo.Al firente de la ejecutiva recién elegida se encuentran, como presidente, el consejero de Trabajo del Gobierno Andaluz, Joaquín Galán, hombre absolutamente fiel a Escuredo, en ...
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La nueva ejecutiva provincial de Sevilla del PSOE, elegida anteanoche en el transcurso de un congreso extraordinario, refleja fielmente el triunfo de la estrecha colaboración iniciada en 1982 entre el secretario regional socialista, José Rodríguez de la Borbolla y el presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo, después de varios años de enfrentamientos entre ambos a propósito de sus concepciones del andalucismo.Al firente de la ejecutiva recién elegida se encuentran, como presidente, el consejero de Trabajo del Gobierno Andaluz, Joaquín Galán, hombre absolutamente fiel a Escuredo, en tanto que el secretario provincial, José Caballos, parlamentario andaluz y portavoz socialista en la Diputación provincial de Sevilla, se alinea habitualmente en las posiciones de, José Rodríguez de la Borbolla. Otro sector del partido, aglutinado por el presidente de la diputación, Miguel Ángel del Pino, decidió a última hora no presentar batalla en la elección de la ejecutiva, tras haber perdido las primeras votaciones del congreso, al reunir apenas un tercio de los mandatos representados en el mismo.
El estrechamiento de relaciones entre Escuredo y Rodríguez de la Borbolla, no dejó de crear cierto malestar en una parte de la dirección socialista, que no acaba de aceptar el creciente protagonismo de Escuredo. Fruto de ese malestar sería la actitud de Miguel Ángel del Pino tratando, sin éxito hasta el momento, de coordinar una alternativa propia a la dirección socialista de Sevilla, decisiva dentro del PSOE andaluz.