Programas independientes y de colectivos ciudadanos acceden a la televisión por cable

Las diferentes concepciones de la micro televisión, aquella que por su sistema de producción y área de difusión se dirige a audiencias restringidas, han sido tratadas en la tercera jornada del seminario La comunicación televisiva en Estados Unidos, organizado por el Instituto de Estudios Norteamericanos de Barcelona. Jaime Davidovich defendió "una televisión alternativa que se nutre de producciones independientes, entre ellas las creaciones de vídeo-arte. Estos programas se emiten por los canales de acceso público, al igual que los producidos por el Centro de Medios Alternativos, del que es di...

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Las diferentes concepciones de la micro televisión, aquella que por su sistema de producción y área de difusión se dirige a audiencias restringidas, han sido tratadas en la tercera jornada del seminario La comunicación televisiva en Estados Unidos, organizado por el Instituto de Estudios Norteamericanos de Barcelona. Jaime Davidovich defendió "una televisión alternativa que se nutre de producciones independientes, entre ellas las creaciones de vídeo-arte. Estos programas se emiten por los canales de acceso público, al igual que los producidos por el Centro de Medios Alternativos, del que es director George C. Stoney, pero orientados a la participación de los ciudadanos en los asuntos comunitarios.

Jaime Davidovich, argentino con nacionalidad norteamericana desde 1968, es el presidente de The Artists Television Network (ATN) y director de programas y productor de Cable Soho, de Nueva York. La ATN se constituyó en 1976 como entidad no comercial con el propósito de concurrir a las emisiones de televisión, concebida como "medio para el arte y los artistas, al objeto de acercar el arte contemporáneo a la gran audiencia", según dijo Davidovich. La ATN emite dos veces por semana sus producciones dentro del espacio titulado Soho Television, difundido por Manhattan Cable y Teleprompter Cable, canales neoyorkinos de televisión por cable, gracias al derecho de acceso público.La intención de ATN, que se financia con fondos de organismos estatales de Nueva York y distintas fundaciones, es integrar en la televisión las producciones de los artistas que trabajan en cualquier medio y no como meros documentos de sus actividades. La televisión, según Davidovich, se convierte así en "un foro con una audiencia mucho más amplia que los estrechos confines de una galería o de un museo". Las grandes emisoras norteamericanas no se interesan, según Davidovich, por la cultura contemporánea y de ahí que el acceso público al cable sea su única forma de penetrar en el medio.

Los programas van desde espectáculos de teatro, danza y música hasta creaciones experimentales, cintas de vídeo-arte (tanto documentales como de expresión artística o pictórica), discusiones colectivas y espacios de crítica y sátira a la televisión, con participación de telespectadores. Pero esta supuesta interacción de la audiencia es muy primaria y se limita a las llamadas telefónicas en directo.

Soho Television compra los trabajos de los artistas, les abona los derechos de emisión y royalties y les costea o facilita los medios técnicos y humanos para la producción. Davidovich tiene su propio show en directo en el que asume el papel ordinario de busto de la pantalla con la pretensión de satirizar la televisión. Montó en la sede del Instituto de Estudios Norteamericanos de Barcelona un pintoresco museo de baratijas y subproductos relacionados con el consumo de televisión: caramelos, televisores de juguete y alimentos precocinados "al estilo alemán" para comer mientras se ve la televisión.

Jordi Pericot, catedrático de Teoría de la Imagen de la Facultad de Bellas Artes, de la Universidad de Barcelona, cuestionó duramente el modelo "alternativo" de Davidovich, al que reprochó "involucionismo" respecto a sus anteriores trabajos. Pericot dijo que pretender hacer una crítica a la televisión desde la propia televisión no es el camino más adecuado porque se trata de un medio que carece de metalenguaje y no permite esa crítica, que, a su juicio, debe ejercerse por otros canales y medios de comunicación. La pretensión de meter el arte en la televisión es ingenua, según Pericot, y no deja de ser una forma de "apostolado". Pericot añadió que el trabajo de Davidovich había perdido su perspectiva crítica hacia la televisión, como medio "fabricador de conciencias", precisamente porque al estar presente en ella se convierte en su sustento.

Televisión de acceso público

George C. Stoney, veterano profesor de cine y televisión de la universidad de Nueva York, codirector del Centro de Medios Alternativos, productor independiente desde 1946, sustenta otro modelo de micro televisión. Tiene en común con Davidovich el hecho de que los dos emiten sus producciones gracias al sistema de acceso público que rige para la radiotelevisión norteamericana. Derecho que también contempla el Estatuto de RTVE, si bien está pendiente de desarrollar. El grupo de Stoney emite alrededor de doce horas semanales también por dos canales del Manhattan Cable. Parte de estos programas están producidos por sus alumnos.El acceso a los medios de comunicación nace de la Primera Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos que reconoce el derecho de los ciudadanos a expresarse libremente. "Hacia 1972 la idea de dedicar un cierto número de canales por cable para uso público en la modalidad primero en llegar-primero en ser y de forma no discriminatoria", dice Stoney, Ilegó a tener tanta aceptación que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), que controla todas estas cosas en los Estados Unidos, requirió a los operadores por cable que ofteciesen dichos canales. En la mayoría de los casos los ciudadanos trabajaron voluntariamente para crear sus propios programas; en muchos lugares tuvieron que buscar dinero pam conseguir los equipos y materiales adecuados. Pero por primera vez existía la posibilidad para un grupo de norteamericanos de tener acceso a la televisión como a las máquinas de mimeografiar o a las imprentas".

Stoney añade que existe gran preocupación en Estados Unidos porque la industria del cable insiste en que "sólo ella debe tener el poder de determinar lo que debe ir en todos los canales con los que opera. Con este fin ha patrocinado una serie de medidas en el Congreso que harían ilegal el requisito de los canales y servicios de acceso público. Lo que nos mantiene en lucha y con esperanzas es que en una democracia tan responsable, en el fondo, como la nuestra, David puede ganar a Goliat".

Stoney mostró en Barcelona un amplio catálogo de las producciones de acceso público, documentales, en su mayoría, sobre la vida cotidiana y los problemas de los ciudadanos; la televisión como medio para conocer el propio entorno o como arma de reivindicación laboral. Enseñó programas de denuncia social sobre la proliferación de armas nucleares, sobre el parto natural, cooperativas de teatro, fiestas populares, educación de niños autistas, etcétera. "La televisión tiende a crear ciudadanos pasivos, nosotros la utilizamos para fomentar la participación en la vida de la comunidad".

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