Vuelta Ciclista a España

La Vuelta, un espectáculo pendiente de la publicidad

El éxito publicitario de la actual edición de la Vuelta a España parece garantizado. Luis Puig, presidente de la Federación Española de Ciclismo, considera que este éxito de la Vuelta no sólo va a repercutir en el definitivo retorno de este deporte al primer plano de la popularidad, sino que además va a motivar a las firmas comerciales, que pueden volcar se en la formación de equipos profesionales.En la actualidad son cinco los equipos profesionales existentes en España, justo los que participan en la actual edición de la Vuelta. En principio, todos tienen la intención de seguir en la brecha, ...

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El éxito publicitario de la actual edición de la Vuelta a España parece garantizado. Luis Puig, presidente de la Federación Española de Ciclismo, considera que este éxito de la Vuelta no sólo va a repercutir en el definitivo retorno de este deporte al primer plano de la popularidad, sino que además va a motivar a las firmas comerciales, que pueden volcar se en la formación de equipos profesionales.En la actualidad son cinco los equipos profesionales existentes en España, justo los que participan en la actual edición de la Vuelta. En principio, todos tienen la intención de seguir en la brecha, e incluso alguno, como el Reynolds, tiene a varios corredores firmados por dos años, como al actual campeón de España José Luis Laguía, con un contrato de ocho millones de pesetas por las dos temporadas.

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Desde el año 1980, con el triunfo de Faustino Rupérez -hoy en el Zor- en la Vuelta a España y las victorias internacionales del también Zor Juan Fernández, se propició el principio del resurgimiento de un deporte como el ciclismo, que había sido en España santo y seña de grandes figuras (como los Bahamontes, Julio Jiménez, Luis Ocaña o José Manuel Fuente, por citar los más próximos en el tiempo), pero que lamentablemente había caído en un pozo profundo del que no se veía forma de salir.

El deseo del presidente de la Federación Española de Ciclismo se cifra en los siete equipos profesionales, y no parece que esto pueda resultar utópico en un par de años. La extraordinaria cobertura publicitaria y comercial de la actual Vuelta, con su circo ambulante incluido -al final de cada etapa se realiza un espectáculo, con faquir incluido-, va a desempeñar un papel importante en la popularidad de los corredores.

El ciclismo en ruta es un deporte sin ingresos por taquillaje. Las firmas comerciales realizan el esfuerzo de sostener a equipos profesionales de ciclistas, según el aparato publicitario que arrastre el acontecimiento.

Zor, dirigido por Javier Mínguez, es la marca de unos encendedores, y su presupuesto aproximado ronda los 45 millones de pesetas; Teka, con González Linares como director, es una firma de muebles de cocina y tiene un presupuesto de unos 40 millones; Reynolds, con José Luis Echávarri de director, y un presupuesto también próximo a los 45 millones, es una marca de papel de aluminio; Kelme lo dirige Rafael Carrasco, cuenta con unos 25 millones de presupuesto y es una firma de prendas y artículos deportivos; por último, Hueso, marca de chocolates, tiene unos 20 millones y lo dirige Miguel Moreno.

Entre los cinco equipos profesionales españoles apenas se llega a los 175 millones de pesetas, un presupuesto del que puede presumir -o lamentar- cualquier club de Primera División y que superan también algunos de Segunda.

Respecto a los cinco equipos extranjeros que participan este año en la Vuelta a España, Del Tongo (italiano) y Aernoudt (belga) representan firmas de fabricantes de muebles y están dirigidos, respectivamente, por Pietro Algeri y Fred de Bruyne; el AlfaLum (italiano), equipo en el que militan los hermanos españoles Ismael y Marino Lejarreta -Marino fue el ganador de la pasada edición de la ronda española, tras la descalificación por doping de Ángel Arroyo-, es una firma de lámparas y lo dirige Primo Franchini; el Boule d'Or (belga), dirigido por Willy Jossart, es una marca de cigarrillos; por último, el Renault (francés), dirigido por Cyrille Guimard y cuyo capitán es Hinault, representa a la firma automovilística.

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