Arzallus y Benegas eligieron Vitoria para iniciar el 'duelo' electoral

TONIA ETXARRI, Las dos fuerzas mayoritarias del País Vasco -PNV y PSOE- eligieron ayer Vitoria como punto de arranque para iniciar la campaña electoral. Mientras los nacionalistas han decidido concentrar esfuerzos en la capital alavesa para continuar manteniendo su alcaldía y así permanecer en la presidencia de los tres órganos de poder ubicados en la capital -Gobierno vasco, Diputación y Ayuntamiento-, los socialistas piensan poner todo su empeño en quebrar la hegemonía nacionalista por el fianco municipal.

Mientras el secretario general del Partido Socialista de Euskadi, Txiki Benegas...

TONIA ETXARRI, Las dos fuerzas mayoritarias del País Vasco -PNV y PSOE- eligieron ayer Vitoria como punto de arranque para iniciar la campaña electoral. Mientras los nacionalistas han decidido concentrar esfuerzos en la capital alavesa para continuar manteniendo su alcaldía y así permanecer en la presidencia de los tres órganos de poder ubicados en la capital -Gobierno vasco, Diputación y Ayuntamiento-, los socialistas piensan poner todo su empeño en quebrar la hegemonía nacionalista por el fianco municipal.

Mientras el secretario general del Partido Socialista de Euskadi, Txiki Benegas, señalaba, en el curso de una conferencia de prensa, que "trabajar por el cambio en Alava significa que no gobierne el PNV", Xabier Arzallus precisaba que "Euskadi es la única autonomía donde el PSOE no manda, a pesar de un 28 de octubre que no repetirán ya nunca".Ante 1.500 cargos electos, el dirigente nacionalista comenzó la campaña electoral en Vitoria, brindando una nueva oferta de diálogo a los socialistas para señalar que es, precisamente, el PSOE el partido que se niega a colaborar con otras fuerzas para resolver los problemas de Euzkadi. En opinión de Arzallus, la autonomía vasca es la más conflictiva "porque es la que más ha luchado para conseguir sus derechos".

Para justificar la indefinición de su partido ante la despenalización del aborto, el dirigente nacionalista lo citó, en su discurso, como ejemplo de un problema político general que no debe ser utilizado en esta campaña de carácter municipal.

En un tono marcadamente duro, el dirigente nacionalista recordó que "no es la primera vez que nos han venido con campañas sucias; y aquí estamos. Cuanto más nos atacan, mejor nos sabemos defender. En todo caso, si nos lanzan el guante, lo recibimos y que elijan el arma, porque estamos dispuestos a responder como un solo hombre". Volvió a precisar la disposición de su partido en la lucha contra el terrorisñio, pero recordó que no podía colaborar con el Gobierno central si previamente no existía un plan de acción conjunta. "Quiero empezar la campaña con una oferta nueva de diálogo".

Los socialistas, por su parte, iniciaron la campaña centrando sus críticas en las contradicciones que los nacionalistas del Gobierno vasco, Diputación y Ayuntamiento han vivido en los últimos tres años. Anunciaron su intención de imprimir a los mensajes electorales un carácter esencialmente municipal, pero, dado que las instituciones autonómicas están instaladas en la capital alavesa, no eludieron resaltar la no identificación de sectores vitorianos menos nacionalistas con la preseticia en la capital del Gobierno vasco y del Parlamento.

El primer mensaje socialista de la campaña fue lanzado en Vitoria, en el curso de la conferencia de prensa, por Txiki Benegas, quien, tomando como punto de referencia el eslogan del PNV, "Ésto marchd', dijo que en Euskadi se está atravesando una situación en la,que "no marcha nada", debido a la falta de proyecto político del Gobierno vasco y del partido mayoritario.