El español Ángel Arroyo, nuevo Iíder

Angel Arroyo (25 años de edad), nacido en la localidad abulense de El Barraco, se vistió ayer con el maillot amarillo de líder de la Vuelta Ciclista a España, al entrar en segunda posición, a un segundo del sueco Swen Nilsson, en la décima etapa, disputada ayer entre Puigcerdá y San Quirze del Vallés, de 181 kilómetros de recorrido. El tiempo empleado por el vencedor fue de 4 horas, 27 minutos, 52 segundos, a la velocidad media de 40,542 kilómetros por hora.El primer grupo que entró en la meta tras Nilsson y Angel Arroyo lo hizo a 1.27 minutos, encabezado por el francés Villemiane, José...

Angel Arroyo (25 años de edad), nacido en la localidad abulense de El Barraco, se vistió ayer con el maillot amarillo de líder de la Vuelta Ciclista a España, al entrar en segunda posición, a un segundo del sueco Swen Nilsson, en la décima etapa, disputada ayer entre Puigcerdá y San Quirze del Vallés, de 181 kilómetros de recorrido. El tiempo empleado por el vencedor fue de 4 horas, 27 minutos, 52 segundos, a la velocidad media de 40,542 kilómetros por hora.El primer grupo que entró en la meta tras Nilsson y Angel Arroyo lo hizo a 1.27 minutos, encabezado por el francés Villemiane, José Luis Laguía y el suizo Mutter, entrando con ellos también el hasta hoy maillot amarillo, el belga Claude Criquelion.

La inteligencia de Angel Arroyo le sirvió para conquistar ayer el maillot amarillo que fue defendido hasta el último momento por Criquelion, pero al belga le falló ayer su equipo, aunque contó con la colaboración del Kelme, que tiró del grupo de cabeza en los últimos kilómetros.

Claude Criquelion, quizá demasiado preocupado con José Luis Laguía, líder del premio de la montaña, del que no se despegó en el ascenso a os puertos e a etapa, se vio sorprendido por Angel Arroyo, que jugó muy bien su baza en el ascenso al coll de Estanelles, de segunda categoría, situado tan, sólo a 26 kilómetros de la meta de San Quirze del Vallés.

Angel Arroyo se escapó con el sueco Swen Nillson, líder del equipo francés Wolber, a diez kilómetros de la cima de Estenalles; ambos coronaron el puerto con 1.17 de ventaja sobre Laguía y Marino Lejarreta, y 1.29 sobre el grupo de Criquelion, que se uniría en el descenso a los dos anteriormente citados. El descenso hasta la meta, a donde se llegó con más de media hora de adelanto, fue mero trámite para los escapados, que se presentaron en la línea de llegada con cerca de minuto y medio de ventaja sobre el primer grupo.