Madrid, Atlético y Real Sociedad, con la angustia de no fallar

La Liga, a ocho jornadas de su final, se encuentra casi decidida en cuanto al título, pero con una situación sorprendente en los últimos puestos. Un Barcelona destacado y en forma puede despegarse aún más en Alicante, donde el Hércules ha dado facilidades ya a equipos peores. El Madrid, con Santillana, del Bosque y Cunningham disponibles, se despedirá definitivamente de la lucha por la cabeza si falla en Valladolid, pese a poder contar, al fin, con su mejor equipo. Le ocurrirá lo mismo que a la Real Sociedad, visitante al completo de un Atlético hundido, que tampoco puede ceder más puntos, con...

La Liga, a ocho jornadas de su final, se encuentra casi decidida en cuanto al título, pero con una situación sorprendente en los últimos puestos. Un Barcelona destacado y en forma puede despegarse aún más en Alicante, donde el Hércules ha dado facilidades ya a equipos peores. El Madrid, con Santillana, del Bosque y Cunningham disponibles, se despedirá definitivamente de la lucha por la cabeza si falla en Valladolid, pese a poder contar, al fin, con su mejor equipo. Le ocurrirá lo mismo que a la Real Sociedad, visitante al completo de un Atlético hundido, que tampoco puede ceder más puntos, con la segunda división a la vuelta de la esquina. Los problemas atacantes rojiblancos se agudizarán al no poder reaparecer Hugo Sánchez y ser baja Rubio, con gripe.

El interés de la Liga en la actual temporada tiene una nueva e insólita vertiente. Aparte de la disputa del título y de la lucha normal por escapar del descenso, lo original en esta ocasión es que dos equipos de teórica entidad, como el Atlético de Madrid y el Spórting de Gijón, se encuentran entre los máximos candidatos a bajar a segunda división. El cuadro asturiano, además, penúltimo en la tabla, con cinco negativos, visita hoy al Valencia, que aún no ha logrado asegurar una plaza para ese mal menor europeo de los equipos grandes llamado Copa de la UEFA. El cambio de entrenador, Novoa por Miera, tradicional y triste revulsivo, tratará de evitar un desastre como el sucedido al Betis, campeón de Copa hace unos años, con siete jugadores convocados para la selección, y que no pudo evitar la pérdida de la categoría.El caso del Atlético también se presenta muy delicado. Aunque juega en su terreno del Manzanares, recibirá nada menos que a la Real Sociedad, todavía con ilusiones y posibilidades de revalidar su título. Los donostiarras, a cuatro puntos del líder Barcelona, pero a cinco reales, pues en caso de empate final saldrían perjudicados en el coeficiente particular, no pueden ceder más ventaja. Los rojiblancos, con dos negativos y los mismos puntos que el Hércules, antepenúltimo clasificado, se encuentran al borde del abismo. El consejo de la directiva de concentrar al equipo un día antes y en El Escorial dice mucho de la seriedad que entraña la situación.

Los problemas atacantes del Atlético se agravaron ya desde anteayer con las bajas de Hugo Sánchez, que no reaparecerá, y de Rubio, cuya fiebre incluso aumentó ayer. Junto a Marcos, el único seguro, estarán Rubén Cano o Cabrera, por el centro, y Marian o Pedro Pablo, en el otro extremo.

El resto del equipo no sufrirá variaciones respecto a los nombres habituales, pues Clemente tampoco se concentró, igualmente con gripe. Jugarán: Mejías; Juanjo, Balbino, Arteche, Julio Alberto; Ruiz, Dirceu y Quique. Los precios de las entradas oscilarán entre las 2.500 pesetas y las 900. El club, como único triunfo seguro, que le vendrá magníficamente a su siempre mala economía, tendrá la última recaudación importante de la temporada -salvo con el Valencia, quizá-. Espera conseguir los veinticinco millones de taquilla. A partir de las 16.30 arbitrará García de Loza, un buen colegiado.

La Real Sociedad no tiene bajas en esta ocasión, recuperado Zamora, ya el pasado domingo, y también Celayeta. Alineará a Arconada; Celayeta, Górriz, Kortabarría, Olaizola; Diego, Alonso, Zamora; Uralde, Satrústegui y López Ufarte. El cuadro de Ormaechea, que juega bien, con su estilo armado habitual, le falta esta temporada algo de punch, justamente lo que le sobra al Barcelona.

Lattek, hombre clave

Lattek, el entrenador azulgrana, ha sido el hombre clave para un club que siempre ha tenido las mejores plantillas teóricas, pero le faltaba espíritu de sacrificio y capacidad de reacción. Además, la directiva actual del Barcelona empieza a encauzar bien los destinos de un monstruo, insólito en el fútbol mundial con sus 105.000 socios, que siguen aumentando. Hasta ahora ninguna lo había logrado, entre otras cosas, porque el complejo blanco era su absurda losa y cualquier síndrome, se llamara Di Stéfano, Quini o Schuster, podía romper la mejor oportunidad de conseguir títulos, la lógica obsesión de cualquier entidad. El club azulgrana no sólo ya es grande, sino que comienza a saber serlo con todo lo que ello implica.

En el equipo de Lattek también cabe el fallo, pero mucho menos y, sobre todo, existe una gran capacidad de recuperación. Por juego merece el título y por moral más aún. Difícilmente se le escapará. Alicante, hoy, con Estella recuperado, puede ser otro paso o un simple resbalón. Casi da lo mismo ya.

Valladolid, baza decisiva blanca

El Real Madrid, mientras tanto, con el dato positivo de no tener bajas y poder contar con Santillana, Del Bosque y Cunningham, puede decir adiós al título si no gana en Valladolid. A cinco puntos del Barcelona y siete positivos, cuando sólo quedarán después de la jornada de hoy catorce en disiputa, no está ya para perder nada. Jugarán: Agustín; San José, Sabido, Gallego, Camacho; Del Bosque, Stielike, Angel o García Hernández; Juanito, Santillana y Cunningham o Pineda. Los cambios dependerán de las obligadas necesidades atacantes.

El Valladolid, otro equipo en apuros y con tensiones internas, tiene muchas dudas, pues de sus lesionados ha recuperado a Jorge, pero no a Rusky y Minguela. Paquito ha llamado a dos jóvenes del Valladolid Promesas, fider del grupo octavo de tercera división: Eutiquio y Duque. Podrían jugar, con un prudente 4-4-2: Fenoy; Eutiquio, Gilberto, Santos, Sánchez Valles; Pepín, Gail, Moré, Duque; Jorge y Alí Navarro. Arbitrará el murciano Jiménez Madrid desde las cinco de la tarde.

El nuevo estadio vallisoletano difícilmente se llenará por los elevados precios de las entradas, incluso para los socios.