Lluis Llach reclama de TVE una indemnización por incumplimiento de contrato
Hoy se celebrará en la Magistratura de Trabajo número 15 de Barcelona un juicio promovido por el conocido cantante catalán Lluis Llach contra Televisión Española. El cantante solicita una indemnización de 6.900.000 de pesetas por incumplimiento de un contrato suscrito con Televisión en febrero de 1981 para la grabación del programa Especial Lluis Llach. El mencionado programa debía ser la primera actuación de Lluis Llach en Televisión Española desde 1977. El cantante viene siendo objeto de un extraño silencio por parte de este medio de comunicación, a pesar de haber actuado durante los ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Hoy se celebrará en la Magistratura de Trabajo número 15 de Barcelona un juicio promovido por el conocido cantante catalán Lluis Llach contra Televisión Española. El cantante solicita una indemnización de 6.900.000 de pesetas por incumplimiento de un contrato suscrito con Televisión en febrero de 1981 para la grabación del programa Especial Lluis Llach. El mencionado programa debía ser la primera actuación de Lluis Llach en Televisión Española desde 1977. El cantante viene siendo objeto de un extraño silencio por parte de este medio de comunicación, a pesar de haber actuado durante los últimos años en numerosas televisiones del mundo. Serán testigos de Llach en el juicio Marína Rosell, Frances Pí de la Serra y María del Mar Bonet.El contrato suscrito entre el cantante y RTVE debía realizarse antes del 20 de abril de 1981. La remuneración pactada ascendía a 300.000 pesetas, cantidad poco importante para RTVE, quien alegó posteriormente no tener presupuesto para cubrirla. El cantante rechazó otras ofertas profesionales a través de su agente, Joan Molas, entre ellas, varios recitales en París durante los últimos días de marzo de 1981, con una remuneración ofertada de 1.300.000 de pesetas.
La citada pérdida económica, calificada jurídicamente de lucro cesante, y el daño moral consiguiente por las pérdidas publicitarias a través de Televisión en la promoción del disco Verges 50, han servido de fundamento al cantante catalán para la interposición de su demanda.