Los barcos pequeños se impusieron en el Pacífico sur

La tercera etapa de la Vuelta al Mundo, Auckland-Mar del Plata, a través del Pacífico sur y teóricamente una de las dos más difíciles de la prueba, constituyó un triunfo inesperado de los barcos más pequeños, dadas las condiciones bonancibles de la mar y el tiempo. Aunque en tiempo real se volvió a imponer el holandés FIyer, al igual que en las dos ocasiones anteriores, en tiempo compensado ganó el Morbihan francés, de sólo 14,85 metros de eslora, diez menos que el anterior.

El cabo de Hornos, la punta más austral del mundo, temida por todos los navegantes, fue pasado con buen tiempo y ...

La tercera etapa de la Vuelta al Mundo, Auckland-Mar del Plata, a través del Pacífico sur y teóricamente una de las dos más difíciles de la prueba, constituyó un triunfo inesperado de los barcos más pequeños, dadas las condiciones bonancibles de la mar y el tiempo. Aunque en tiempo real se volvió a imponer el holandés FIyer, al igual que en las dos ocasiones anteriores, en tiempo compensado ganó el Morbihan francés, de sólo 14,85 metros de eslora, diez menos que el anterior.

El cabo de Hornos, la punta más austral del mundo, temida por todos los navegantes, fue pasado con buen tiempo y vientos flojos. En la general manda, después de las tres etapas, el también galo Charles Heidsieck III. El barco español, Licor 43, aún no ha llegado, con su aparejo de fortuna, tras haber roto por segunda vez su palo.En segunda posición, siempre en tiempo compensado, una vez aplicado el rating -coeficiente según las características de los barcos- quedó el Disque d'Or. El barco suizo había superado al Charles Heidsieck III al poco tiempo de su llegada triunfal, que le aseguraba el primer puesto en la clasificación general de la prueba. La lucha en la última etapa, Mar del Plata-Portsmouth, con sólo siete horas actualmente de ventaja de este último sobre otro barco francés, el Kriter IX, será cerrada.

El Morbihan, en tiempo compensado, empleó 527 horas y 56 minutos, casi veintidós días, para navegar entre Auckland, en Nueva Zelanda, y Mar del Plata, en Argentina. El Disque d'Or quedó con 531.46 y en tercera posición, el surafricano Xargo III, con 538.17. Otro de los barcos pequeños, el Outward Bound neozelandés, fue cuarto con 545.56, ante el Charles Heidsieck III, que completó 554.03, inmediatamente delante de los tres primeros maxibarcos: el Ceramco, también nezelandés, nuevamente, segundo en tiempo real, que en el compensado sumó 558.27, el Euromarché galo de Eric Tabarly, tercero, que al fin despertó en esta etapa, con 568.33 y el Flyer, que pese a su triunfo sólo pudo ser octavo debido a su rating, con 570.38.

El Flyer estableció un nuevo record

El Flyer, estableciendo un nuevo récord de la etapa, como en las anteriores, tardó en tiempo real 24 días, 1 hora, 22 minutos y 30 segundos, para recorrer las 5.800 millas, casi 9.800 kilómetros, es decir, a una velocidad media impresionante para un velero de 10,2 nudos. El barco del multimillonario holandés barón Cornelius von Reitschoten, que con el anterior Flyer, ahora Alaska Eagle -se lo vendió a otro multimillonario, el norteamericano Neil Bergt- venció en la pasada edición, llegó a navegar 327 millas, unos 550 kilómetros en un día; 1.200 millas en cuatro; 2.050 en siete y logró, durante seis horas, alcanzar una media de 14,6 nudos.Estas marcas, con velocidades en ciertos momentos, de 35 nudos, jamás habían sido conseguidas por un velero de un solo casco. En el total de tiempo real de la prueba, sumadas las tres etapas, ha invertido en navegar más de 25.000 kilómetros 2.177 horas y 3 minutos, pero debido á su rating sólo se le rebajan, en tiempo compensado, a 2.154 horas y 2 minutos, que le colocan en el tercer lugar. Al Charles Heidsieck III, en cambio, que en tiempo real ha tardado 2.333 horas y 24 minutos, su mejor rating le ha permitido alcanzar la cabeza de la prueba en el tiempo compensado, con sólo 2.120 horas y 40 minutos. En realidad, la Vuelta al Mundo deberá, en el futuro, disputarse por categorías y tamaños de barcos.