Debate en "La clave" sobre la libertad de información
El programa La clave, que se emite esta tarde en directo a partir de las 19.30 horas, por la segunda cadena, está dedicado al tema «libertad de información». Intervienen en el debate: Viktor Afanasiev, director del diario Pravda, de Moscú; Karl Weiss, coordinador de Política y Cultura de la cadena de Televisión ARD, de la República Federal de Alemania; Antonio Castro Villacañas, ex delegado nacional de Prensa y Radio del Movimiento; Antonio Herrero Losada, director de la agencia Europa Press; Rafael Calvo Serer, presidente de la sociedad editora del desaparecido diario Madrid, y Juan Luis Cebr...
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El programa La clave, que se emite esta tarde en directo a partir de las 19.30 horas, por la segunda cadena, está dedicado al tema «libertad de información». Intervienen en el debate: Viktor Afanasiev, director del diario Pravda, de Moscú; Karl Weiss, coordinador de Política y Cultura de la cadena de Televisión ARD, de la República Federal de Alemania; Antonio Castro Villacañas, ex delegado nacional de Prensa y Radio del Movimiento; Antonio Herrero Losada, director de la agencia Europa Press; Rafael Calvo Serer, presidente de la sociedad editora del desaparecido diario Madrid, y Juan Luis Cebrián, director de EL PAIS. Modera José Luis Balbín, director del programa.
El debate será precedido de la emisión del largometraje Sucedió una noche, la comedia más representativa de la época del new deal americano y, sin duda, la más popular de su director, Frank Capra. El optimismo con que este autor vio las relaciones sociales y la situación política de su país, una vez superada la depresión de 1929, ha si do considerada por muchos historiadores sólo por su ingenuidad y el reaccionarismo que comporta.Tiene, sin embargo, Capra muchos otros elementos para ser enjuiciados. Muy en primer lugar, su enorme habilidad narrativa para transformar la comedia almibarada y grandilocuente de años anteriores en un espectáculo diáfano y accesible. Fue precisamente esa la gran sorpresa de Sucedió una noche, para la que no contó con decorados espectaculares, vistosos trajes, ni peripecias retorcidas.
Su infantil idea de que cualquier ciudadano podía convertirse en presidente de Estados Unidos le llevó a utilizar como protagonistas a personales extraídos de la vulgar vida cotidiana, con los que cualquier espectador podía identificarse; el mediocre periodista que aquí interpreta Clark Gable tenía muchos puntos en común con cualquier otro empleado.
La influencia que el cine de la década de los treinta tenía sobre el comportamiento colectivo de los americanos obtuvo en esta película una anécdota que muchos dan por cierta. Cuando Clark Gable debe vestir un pijama, los espectadores vieron, sorprendidos, que no utilizaba camiseta; desde entonces, la industria de prendas interiores se vio con cierta dificultad para sobrevivir. Otro tanto se dice del invento de las camas separadas, que rompía el tradicional lecho único para matrimonios legales y estables.