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Luis Buñuel

ha decidido convertir su silencio en memoria, y para cumplir con esa vocación de recuerdo que suele tenerse a cierta edad ha requerido los servicios de un escritor que le es muy querido, Jean-Claude Charriere, autor de muchos de sus guiones y, aparentemente, devoto del sentido del humor y del genio del ilustre aragonés errante. Charriere ha manifestado que el director de Viridiana hablará de todo, incluso de lo que él llama la prehistoria, en Calanda, su pueblo, y Aragón. No serán unas memorias cortas, "sino un libro de quinientas páginas", en las que Buñuel se referirá a ...

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ha decidido convertir su silencio en memoria, y para cumplir con esa vocación de recuerdo que suele tenerse a cierta edad ha requerido los servicios de un escritor que le es muy querido, Jean-Claude Charriere, autor de muchos de sus guiones y, aparentemente, devoto del sentido del humor y del genio del ilustre aragonés errante. Charriere ha manifestado que el director de Viridiana hablará de todo, incluso de lo que él llama la prehistoria, en Calanda, su pueblo, y Aragón. No serán unas memorias cortas, "sino un libro de quinientas páginas", en las que Buñuel se referirá a sus etapas española, francesa, mexicana e incluso hollywoodense. Luis Buñuel tiene ahora 81 años; dice que está sordo y lo oye todo; afirma que adora la soledad y busca a sus amigos para compartir el vino, y se excusa por su mala memoria y todo lo tiene almacenado, como un sistema informático.

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