La Copa Davis, el torneo mejor dotado del mundo

La edición número setenta de la Copa Davis, la competición por equipos más importante del tenis, y cumbre hasta la proliferación de los premios en los torneos individuales de los últimos años, ha comenzado con una nueva fórmula, que le permita renacer. Es el tercer sistema de competición que utiliza y la primera vez que habrá dinero por medio. Será el torneo mejor dotado del mundo. La Primera División, donde se dilucidará el título, acaba de pasar el primer cabo de los octavos de final, mientras, en Segunda, Chile y la India ya han ascendido para 1982, y las dos zonas europeas, en una de las c...

La edición número setenta de la Copa Davis, la competición por equipos más importante del tenis, y cumbre hasta la proliferación de los premios en los torneos individuales de los últimos años, ha comenzado con una nueva fórmula, que le permita renacer. Es el tercer sistema de competición que utiliza y la primera vez que habrá dinero por medio. Será el torneo mejor dotado del mundo. La Primera División, donde se dilucidará el título, acaba de pasar el primer cabo de los octavos de final, mientras, en Segunda, Chile y la India ya han ascendido para 1982, y las dos zonas europeas, en una de las cuales jugará España, se iniciarán en mayo.

Los tiempos cambian y la Federación Internacional de Tenis, tutora de la Copa Davis, no tuvo más remedio que aprobar en la última asamblea anual, celebrada en Viena, la nueva forma de disputa del torneo. Ya no habrá enfrentamientos por zonas geográficas, que teóricamente eran de todos contra todos, aunque dirigidos, en muchas fechas, difíciles de compaginar. Según se aprecia en los cuadros adjuntos, existe ya una primera división, con los dieciséis mejores clasificados en la edición de 1980, que se resolverá en cuatro rondas, y una segunda dividida en cuatro zonas, cuyos campeones -dos ya conocidos, de la americana, Chile, y la asiática, India- sustituirán a los cuatro últimos de primera. Al igual que ya se conocen los cuartos de final «para el título» -Argentina-Rumanía, Gran Bretaña-Nueva Zelanda, Suecia-Australia y Checoslovaquia-Estados Unidos, a disputarse en la semana del 5 al 11 de julio próximos-, los perdedores de los octavos se enfrentarán por el mismo orden del tablero en septiembre, y los nuevos derrotados; bajarán a segunda división: Brasil-RFA, Italia-Corea del Sur, Japón-Francia y México-Suiza. Los dos equipos asiáticos, los únicos que perdieron por sendos y contundentes marcadores de 5-0 en la primera ronda, pues las restantes eliminatorias terminaron con apretados 3-2, parecen, pues, candidatos claros al descenso.Chile e India, ganadores de Colombia e Indonesia, por 3-2 igualmente, ya seguros sustitutos. España, en plena renovación, podría alcanzar el triunfo en su zona, aunque con el «permiso» de Polonia -si juega Fibak-, de Hungría -con Taroczy- e incluso Yugoslavia. Desde luego, es un grupo más difícil que: el B, donde sólo la URSS y, tal vez, Austria tienen cierta entidad. De cualquier forma, con el dinero que ahora habrá en juego, equipos que no habían podido contar con sus figuras, muy posiblemente lo harán ya, al menos más libremente, y ello influirá en cada momento.

Un millón de dólares

En efecto, al margen de la selección de los mejores, y de los ascensos o descensos, el tema económico será clave. La FIT firmó un contrato de tres años con la firma japonesa Nippon Electric Company (NEC), por el que ésta pondrá en cada uno un millón de dólares -actualmente casi 87 millones de pesetas- para premios. La quinta parte-diecisiete y medio- será para el ganador en cada edición, además de la tradicional ensaladera de plata; el finalista obtendrá 8.700.000 pesetas; los dos semifinalistas derrotados, seis millones y medio cada uno; los cuartofinalistas, igualmente derrotados, 4.300.000; los ganadores de eliminatoria para eludir el descenso, 2.600.000, e incluso los descendidos, 1.700.600. Chile y la India, como los futuros vencedores de las zonas europeas de segunda división, han ganado ya 1.400.000. Cabe señalar que los torneos individuales más importantes aún no llegan al medio millón de dólares de dotación.La Copa, fundada en 1900 por un norte americano de San Luis, Dwight Davis, opuso en las tres primeras ediciones -1900, 1902 y 1903, pues en 1901 no se disputó- a dos países solamente: Estados Unidos y Gran Bretaña, en un encuentro anual conocido por Challenge Round, Bélgica y Francia se incorporaron ya en 1904, y el primero, tras vencer a los galos -Estados Unidos no tomó parte en esa edición-, perdió con Gran Bretaña, que defendía el título. Sucesivamente, el número de participantes aumentó, pero el sistema de la Challenge Round, es decir, que el campeón de cada edición «sólo esperase» en la final al vencedor de los restantes equipos en la siguiente, se mantuvo hasta 1972, en que quedó suprimido. De todas formas, aunque el ganador entró ya en las distintas eliminatorias, los países más fuertes siguieron beneficiados en las zonas geográficas merced a sorteos dirigidos.

Interés decreciente

Sin embargo, por una parte, la gran cantidad de equipos participantes, que incluso obligaba en las últimas ediciones a comenzar los primeros partidos antes de la final de la anterior, ofrecía cada vez menos interés deportivo. Por otra, la competencia de los torneos individuales, cada vez mejor dotados económicamente desde que acabó la absurda separación de profesionales y aficionados -más falsos que en cualquier otro deporte-, restaba claramente participaciones destacadas de jugadores, que preferían, como buenos profesionales ya, el dinero abundante a defender simbólicamente a su país.Sonados fueron, por ejemplo, los problemas en el equipo español, y más recientemente, Guillermo Vilas se enfrentó a la Federación Argentina por el mismo motivo. Orantes e Higueras ya no entran en los planes de Santana. Vilas, en cambio, ha vuelto a ser clave, precisamente ante la RFA -por el fallo de José Luis Clerc- para el paso de su país a los cuartos de final, de los que ha quedado apeada Italia, cuatro veces finalista en los últimos cinco años, ganadora en 1976 ante Chile y perdedora en 1980 ante Checoslovaquia. Gran Bretaña, gracias, sobre todo, a Buster Mottram, fue la culpable.

Rumanía, sin Nastase, sancionado todo el año 1981 para la Copa Davis por sus incorrecciones en la pasada edición contra Gran Bretaña, en Eastbourne, dio una relativa sorpresa al derrotar a Brasil. El joven Segerceanú se bastó para dominar a los veteranos Koch y Kirmayr. Suecia, sin Borg, como Nueva Zelanda, tenían los pasos más fáciles ante los dos equipos asiáticos, los más flojos. Los máximos apuros fueron para Estados Unidos, el gran favorito, pues el «regreso» de Raúl Ramírez-que ganó a Tanner y colaboró en el doble- obligó a McEnroe a no fallar. El triunfo de Smid sobre Gunthardt, el número uno suizo, decantó la victoria checa en Zurich y «permitió» a Lendl enfadarse por una bola dudosa y marcharse en el último partido. Su gesto podría ocasionarle una lógica sanción. En la eliminatoria más igualada, por último, Australia, que lucha por acercarse a sus mejores tiempos, encontró su pilar en McNamara, que venció al negrito Yannick Noah.

Historial

El historial de la Copa Davis sigue dominado por Estados Unidos, que ya pasó a tener el mayor número de triunfos al final de los anos sesenta. Actualmente tiene veintiséis, por veinticuatro de Australia, nueve del Reino Unido, seis de Francia y uno de Suráfrica, Suecia, Italia y Checoslovaquia, respectivamente. Estados Unidos ha sido también el mayor número de veces finalista perdedora: veinticinco, por quince de Australia, ocho del Reino Unido, cinco de Italia, tres de Francia y Rumanía, dos de España e India y una de Bélgica, Japón, México, RFA, Checoslovaquia y Chile.Los resultados de las finales desde 1972, en que terminó la «era de la Challenge Round, fueron: 1972 (Bucarest): Estados Unidos, 3; Rumanía, 2 -el mismo resultado de 1971, en Charlotte (Carolina del Norte). 1973 (Cleveland): Australia, 5; Estados Unidos, 0. 1974: Suráfrica ganó a la India, que se negó a jugar. 1975, (Estocolmo): Suecia, 3; Checoslovaquia, 2. 1976 (Santiago): Italia, 4; Chile, 1. 1977 (Sidney): Australia, 3; Italia, 1. 1978 (Palm Springs): Estados Unidos, 4; Reino Unido, 1. 1979 (San Francisco): Estados Unidos, 5; Italia, 0. 1980 (Praga): Checoslovaquia, 4; Italia, 1.

En semifinales interzonas de la última edición, Checoslovaquia ganó a Argentina -fue la gran sorpresa- en Buenos Aires, e Italia, a Australia en Roma. En cuartos -finales de zonas geográficas-, Argentina, a Estados Unidos; Checoslovaquia, a Rumanía; Australia, a Nueva Zelanda, e Italia, a la RFA. Esta fue verdugo de Suecia, semifinales, de zona (integradas por los que serían ya dieciséis equipos de primera para 1981), y todavía antes de España.