Gerulaitis, eliminado de los campeonatos de Estados Unidos

Otro cabeza de serie, esta vez el número cinco, quedó eliminado de los campeonatos abiertos de tenis de Estados Unidos. El norteamericano Vitas Gerulaitis perdió sorprendentemente con su compatriota Hank Pfister en cinco sets, decidiéndose el último por la muerte súbita. El partido era correspondiente a la segunda ronda del torneo.Los resultados de la tercera jornada, disputada ayer, no podemos ofrecerlos completos por la diferencia horaria con Estados Unidos. A la hora de cerrar la presente edición sólo dos tenistas destacadas habían solventado ya sus partidos: Chris Evert y Vir...

Otro cabeza de serie, esta vez el número cinco, quedó eliminado de los campeonatos abiertos de tenis de Estados Unidos. El norteamericano Vitas Gerulaitis perdió sorprendentemente con su compatriota Hank Pfister en cinco sets, decidiéndose el último por la muerte súbita. El partido era correspondiente a la segunda ronda del torneo.Los resultados de la tercera jornada, disputada ayer, no podemos ofrecerlos completos por la diferencia horaria con Estados Unidos. A la hora de cerrar la presente edición sólo dos tenistas destacadas habían solventado ya sus partidos: Chris Evert y Virginia Wade, vencedoras ambas ante rivales poco cualificadas. En categoría masculina, los cabezas de serie que aún quedan en luego no habían finalizado sus eliminatorias.

Yannick Noah, jugador número uno de Francia, que se encuentra disputando los Campeonatos de Estados Unidos, dijo hace unos días que la droga estaba presente en el mundo del tenis. Ahora, el doctor Cousteau, médico de las selecciones francesas de tenis, indicó que el problema de las drogas entre los jugadores es real.

Noah manifestó a la revista Rock and Folk que a él, personalmente, le gustaba fumar hachís, y que otros jugadores, sobre todo suramericanos, recurrían al doping. La intervención del doctor Cousteau hace que la cuestión se plantee de una manera más técnica.

Los escépticos recalcan que un partido de tenis nunca se sabe en qué momento preciso empezará ni cuándo terminará, por lo que es absurdo hablar del empleo de las drogas. Esto es cierto cuando se trata de drogas «duras», como la cocaína, pero no se puede decir lo mismo del uso de anfetaminas.