Joan Pastor, sancionado por el PSOE valenciano

Joan Pastor, diputado socialista y ex secretario general del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), ha sido sancionado con dos años de suspensión de sus derechos como militante, por decisión de la comisión de conflictos del PSPV-PSOE. La sanción no afecta a la continuidad como diputado de Pastor, una de las principales figuras del denominado «sector crítico» del PSOE.Joan Pastor, junto a toda la anterior ejecutiva del PSOE valenciano, que antes dominaba el sector crítico, fue expedientado por la nueva dirección regional el otoño pasado, tras unas declaraciones en las que se mostra...

Joan Pastor, diputado socialista y ex secretario general del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), ha sido sancionado con dos años de suspensión de sus derechos como militante, por decisión de la comisión de conflictos del PSPV-PSOE. La sanción no afecta a la continuidad como diputado de Pastor, una de las principales figuras del denominado «sector crítico» del PSOE.Joan Pastor, junto a toda la anterior ejecutiva del PSOE valenciano, que antes dominaba el sector crítico, fue expedientado por la nueva dirección regional el otoño pasado, tras unas declaraciones en las que se mostraba contrario a la, expulsión del antiguo alcalde de Valencia, Fernando Martínez Castellanos, acusado de negligencia en el uso de fondos durante su etapa de secretario de administración.

Pastor afirmó entonces que si se expedientaba a Martínez Castellanos debía abrirse expediente también contra todos los miembros de la anterior ejecutiva, que se solidarizaban con la actuación del sancionado. En el asunto Martínez Castellanos, según manifestó en su día el nuevo secretario general del PSPV, Joan Lerma, «no hay ningún trasfondo político, porque el señor Martínez Castellanos no ha tenido jamás ninguna relevancia política dentro del partido».

Dos años de suspensión.

Como consecuencia de la actitud de Joan Pastor, la comisión de conflictos del PSPV, reunida en Valencia la semana pasada, ha decidido que el ex dirigente pierda sus derechos como militante durante dos años. No podrá asistir a asambleas, ejercer el voto ni presentarse a elecciones para cargos orgánicos, pero se mantienen sus deberes como militante tales como el de cotizar a la organización.La sanción se basa en la consideración de que existe falta grave contra los apartados dos y tres del artículo ocho, y contra el artículo diez, de los estatutos socialistas.

El sancionado puede ahora recurrir contra la decisión que le afecta ante la comisión de conflictos federal, y en último término puede defenderse ante el congreso federal del PSOE.