Otra asamblea inútil en baloncesto

Finalizó el domingo una nueva asamblea del baloncesto que, como viene siendo costumbre, no sirvió para nada. Lo único digno de mención es que la propia federación ha mostrado unos criterios opuestos totalmente a los que ella misma expuso en la última asamblea de hace dos meses, respecto al tema de las edades juveniles. En la anterior asamblea se desperdició un millón de pesetas. El único acuerdo que no se pospuso, el reseñado de las edades, ha sido ahora otra vez variado. Resulta curiosa la comprobación de que 62 votos cambiaron con respecto al criterio mantenido en marzo. Para ello también se...

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Finalizó el domingo una nueva asamblea del baloncesto que, como viene siendo costumbre, no sirvió para nada. Lo único digno de mención es que la propia federación ha mostrado unos criterios opuestos totalmente a los que ella misma expuso en la última asamblea de hace dos meses, respecto al tema de las edades juveniles. En la anterior asamblea se desperdició un millón de pesetas. El único acuerdo que no se pospuso, el reseñado de las edades, ha sido ahora otra vez variado. Resulta curiosa la comprobación de que 62 votos cambiaron con respecto al criterio mantenido en marzo. Para ello también se dispuso las «argumentaciones» de los seleccionadores nacionales de las distintas categorías, salvo, lógicamente, Díaz Miguel. Las edades, en definitiva, y salvo nuevo cambio en un próximo pleno, quedaron así: «premini», ocho y nueve años; mini, diez y once; preinfantil, doce y trece; infantil, trece y catorce; juvenil, quince y dieciséis; junior, diecisiete y dieciocho. Los trece años son válidos para dos categorías (?).

Se mantiene también la ya eterna polémica con los clubes canarios por la lucha sobre gratificaciones económicas a percibir por sus desplazamientos. Respecto al tema arbitral, a los colegiados se les pagarán 40.000 pesetas, y no las 45.000 que solicitaban.

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