Triunfo del ala crítica en el IV Congreso de la UGT de Madrid

Tras un fuerte enfrentamiento entre los sectores llamados crítico y moderado, el IV Congreso de UGT de Madrid terminó el pasado sábado, un día antes de lo previsto, con la victoria, por matemáticas, del sector crítico, que dirigía el secretario general, Valentín Gómez. La reelección de éste fue explicada por fuentes del sector rival como una consecuencia de desplazamientos de votos en la Unión Local de Madrid, que desaparece en su forma actual.

La victoria de Valentín Gómez sobre Carlos Pérez Díaz, candidato del sector moderado y que contaba con el total apoyo de la ejecutiva confederal...

Tras un fuerte enfrentamiento entre los sectores llamados crítico y moderado, el IV Congreso de UGT de Madrid terminó el pasado sábado, un día antes de lo previsto, con la victoria, por matemáticas, del sector crítico, que dirigía el secretario general, Valentín Gómez. La reelección de éste fue explicada por fuentes del sector rival como una consecuencia de desplazamientos de votos en la Unión Local de Madrid, que desaparece en su forma actual.

La victoria de Valentín Gómez sobre Carlos Pérez Díaz, candidato del sector moderado y que contaba con el total apoyo de la ejecutiva confederal de UGT, fue consecuencia de la distribución de todos los votos de la Unión Local de Madrid en favor del primero. Pese a que en esta unión, ahora desaparecida, el número de delegados que apoyó a Gómez fue tan sólo de tres más que los que votaron a Carlos Pérez Díaz, el secretario general elegido pudo hacerse con los 40.000 votos de la unión e inclinar la balanza a su favor.Pero en las diferentes votaciones de las federaciones, Carlos Pérez Díaz derrotó a Valentín Gómez por un margen de 30.000 votos contra 18.000, y sus tesis hubiesen salido adelante si no hubiese existido el problema de la Unión Local madrileña.

Ayer, Carlos Pérez Díaz rechazó las declaraciones de Valentín Gómez a la agencia Efe, en las que éste señalaba que «había triunfado la línea de acción frente a la de despacho, el hombre de la calle frente al teléfono». Según el ugetista del sector moderado, «estas declaraciones son injuriosas, ya que no deja de ser curioso que se nos acuse de sindicalismo de despacho cuando obtuvimos todos los votos del sector metal, precisamente aquel al que el compañero Valentín pertenece, y que le negó los votos».

Según fuentes de la ejecutiva confederal de UGT, lo que ha pasado en el congreso de Madrid es que ha salido victoriosa una candidatura que va en contra de los postulados del 32º Congreso de UGT, y que rechaza el acuerdo-marco y la política que ha seguido el sindicato socialista en el último año. «Su victoria es pírrica», dijo un miembro de esta ejecutiva.

Por su lado, Valentín Gómez declaró ayer que lo que sucede es que «nosotros propugnamos la unidad de acción con CC OO. Estamos a favor de la unidad de la izquierda y no con UCD».

Valentín Gómez valoró el congreso señalando que en él se había llevado la lucha del partido al congreso, a través de la agrupación socialista madrileña «y no lo hemos hecho nosotros», dijo.

La anterior ejecutiva de UGT, encabezada por Valentín Gómez, se mostró contraria al acuerdo-marco interconfederal y al Estatuto de los Trabajadores. En el 32º Congreso de UGT, celebrado recientemente, se aprobó por amplia mayoría la gestión realizada por la anterior ejecutiva centrada en la negociación.

«La línea del 32º Congreso», dijo Valentín Gómez, «refleja la problemática global y no total, tenemos que adaptar sus resoluciones a Madrid, respetando las decisiones mayoritarias».

Por su parte, Carlos Díaz, dijo que espera que la nueva ejecutiva respete las decisiones del 32º Congreso. «Tenemos que ganar las elecciones sindicales», dijo, «y colaboraremos todos para ello. No queremos la guerra».

«Se ha visto en el congreso», dijo, «que se apoya nuestra tesis, ya que hemos ganado por número de votos reales de las uniones y federaciones y si la nueva ejecutiva no cumpliera sus compromisos nos veríamos en la necesidad de hacerlos cumplir».

Añadió que en este congreso se había visto que los viejos temas entre las líneas de Garnacho y de Zufiaur han quedado finiquitados.

Por su lado, un miembro de la ejecutiva confederal declaró que tanto el PSOE como la UGT piensan potenciar en el futuro las federaciones (metal, textil, construcción, etc.).