Pésimo partido en Getafe

Unos tres cuartos de entrada en Las Margaritas, en una mañana calurosa. Getafe y Levante jugaron a los despropósitos. El «espectáculo» que ofrecieron fue de una mediocridad aplastante, para desesperación de los aficionados, que pagaron su entrada con el objetivo de presenciar un partido de fútbol. La excesiva prevención defensiva del Levante y la torpeza ofensiva getafense convirtieron la mañanita en algo insufrible, capaz de agotar los calificativos. Las ocho tarjetas y la expulsión de Crespo fueron prácticamente las únicas notas que alteraron el sopor general. Al final, Pachín, entrenador de...

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Unos tres cuartos de entrada en Las Margaritas, en una mañana calurosa. Getafe y Levante jugaron a los despropósitos. El «espectáculo» que ofrecieron fue de una mediocridad aplastante, para desesperación de los aficionados, que pagaron su entrada con el objetivo de presenciar un partido de fútbol. La excesiva prevención defensiva del Levante y la torpeza ofensiva getafense convirtieron la mañanita en algo insufrible, capaz de agotar los calificativos. Las ocho tarjetas y la expulsión de Crespo fueron prácticamente las únicas notas que alteraron el sopor general. Al final, Pachín, entrenador del Levante, se justificaría con la argumentación de «el fin justifica los medios».

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