Ningún líder de la derecha en la constitución del partido de Silva

Ninguno de los líderes de la derecha española -de Manuel Fraga a Blas Piñar- que habían sido invitados por Derecha Democrática Española (DDE) asistió a la clausura de su congreso constituyente, con distintos pretextos. Federico Silva Muñoz fue elegido presidente del partido por aclamación.En una rueda de prensa anterior al congreso, Silva puso especial énfasis en destacar las invitaciones que se habían cursado a líderes políticos de la derecha hasta la extrerna derecha, y en señalar que el partido nacía, fundamentalmente, con voluntad de aglutinamiento para ese sector. Ninguno de los líderes c...

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Ninguno de los líderes de la derecha española -de Manuel Fraga a Blas Piñar- que habían sido invitados por Derecha Democrática Española (DDE) asistió a la clausura de su congreso constituyente, con distintos pretextos. Federico Silva Muñoz fue elegido presidente del partido por aclamación.En una rueda de prensa anterior al congreso, Silva puso especial énfasis en destacar las invitaciones que se habían cursado a líderes políticos de la derecha hasta la extrerna derecha, y en señalar que el partido nacía, fundamentalmente, con voluntad de aglutinamiento para ese sector. Ninguno de los líderes convocados asistieron al acto, aunque enviaron notas de excusa y algunos expresan apoyo a la idea del nuevo partido.

Como vicepresidentes de DDE resultaron elegidos Gonzalo Fernández de la Mora, Luis Jáudenes, Jesús Barros de Luis y Antonio Méndez. Pedro Mendizábal será secretario, y Rafael Jaude, tesorero.

En el acto de clausura pronunció un discurso Silva, en el que señaló, entre otras Cosas, que «nuestra vocación es de unidad, o al menos, de unión y entendimiento. No nacemos corno el tercer partido de la derecha, sino para sumar a la fuerza de la razón la razón de la fuerza».

Definió al nuevo partido como «absolutamente democrático» y a la democracia como único sistema posible, «pero no podemos admitir», añadió, «que la democracia que se nos ha despachado sea la única posible».

Aseguró que el ideal del partido es «una democracia gobernada que se identifica en una democracia presidencialista, parlamentaria pero no parlamentarista, y cimentada solamente sobre la idea matriz irrenunciable e imprescindible de la unidad de España».

Fernández de la Mora intervino también en la clausura, para afirmar que «la unidad política en la derecha española es muy difícil».

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