lncertidumbre final para Villota

El piloto español Emilio Villota tuvo que abandonar el pasado lunes en la carrera del Campeonato británico de fórmula 1 disputada en, el circuito de Brands Hatch. El tercer lugar del irlandés David Kennedy, por detrás del argentino Zunino y del británico Edwards, permite a Kennedy superar al español en la clasificación del Campeonato, cuando sólo quedan ya tres carreras para terminar el mismo.Hasta ahora, son doce tas carreras que se han disputado. En las primeras, Villota no consiguió resultados. Pese a contar con el coche más competitivo y con un equipo técnico, dirigido por Giuseppe Risi -u...

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El piloto español Emilio Villota tuvo que abandonar el pasado lunes en la carrera del Campeonato británico de fórmula 1 disputada en, el circuito de Brands Hatch. El tercer lugar del irlandés David Kennedy, por detrás del argentino Zunino y del británico Edwards, permite a Kennedy superar al español en la clasificación del Campeonato, cuando sólo quedan ya tres carreras para terminar el mismo.Hasta ahora, son doce tas carreras que se han disputado. En las primeras, Villota no consiguió resultados. Pese a contar con el coche más competitivo y con un equipo técnico, dirigido por Giuseppe Risi -un auténtico fenómeno en estos menesteres-, al más alto nivel, el español no terminaba de acoplarse a su Lotus.

Esas carreras vieron el triunfo del irIándés Kennedy, a los mandos de un veterano Wolf; de Edwards y también de Rupert Keegan, probablemente el piloto más rápido, que, tras ver truncadas sus aspiraciones de formar parte de un equipo importante en el mundial de fórmula 1, encaminó sus pasos hacia el británico cuando este Campeonato había comenzado ya.

Sin embargo, mediada la temporada, Villota comenzó a dominar etorneo, con cuatro victorias casi consecutivas y un segundo puesto. Fue entonces cuando se echaron las campanas al vuelo por parte del piloto y parte de la prensa especializada, con declaraciones muchas veces fuera de lugar, que, en ocasiones, enturbiaban un poco los indudables éxitos del piloto español, creando un clima de rechazo que las actuaciones en la pista de Villota, y su mejoría,desde el punto de vista técnico no merecían.

Pero, entrado el campeonato británico de fórmula1 -una especie de sucedáneo del mundial que, no cuenta ni con la, calidad técnica de los monoplazas ni con el nivel de pilotaje de éste pero que sirve para llevar esta pseudo fórmula 1 a unos circuitos y a unos pilotos que, de otra forma, no la tendrían en su última fase, Ia actuación del español Villota parece haber entrado en un bache. A sus espectaculares victorias de mitad de temporada han seguido dos actuaciones mediocres, que le han hecho perder los nueve puntos de ventaja que contaba sobre Kennedy y ser rebasado por el irlandés.

Ahora quedan tres carreras por disputarse: en Thruxton, el 9 de septiembre; en Snetterton. el 23 de septiembre, y en Silverstone el 7 de octubre. Si los nervios, no le traicionan, Villota puede conseguir su objetivo, que es ganar este Campeonato, algo que persigue desde hace varios años. Su desventaja actual con el líder. Kennedy es de un solo punto, y en esté Campeonato se premian, además de los puestos de final de carrera de igual forma que en el mundial de fórmula 1, las vueltas más rápidas en entrenamientosy en carrera. Eso permite al español unas bazas más para superar a Kennedy, piloto no especialmente, rápido.

Si Emilio Villota logra rizarse con el Campeonato, podrá obtener la superficencia necesaria para poder tomar parte en el mundial de fórmula 1. Eso es algo que le ha prometido el presidente de la Federación Española de Automovilismo, Fernando de Baviera, un hombre que se mueve muy bien en los más altos organismos internacionales. El problema para Villota vendrá después, porque para correr en la fórmula 1 es imprescindible contar con la superficencia, pero además, se precisa muchísimo dinero y un nivel técnico muy alto. Lo primero puede dárselo la Federación, mientras que las otras dos cosas lag tiene que conseguir, por sus propios medios, el piloto. De ahí la dificultad, y el hecho de que pese a que los asiduos en este Campeonato británico son menos, de una docena, alguno de ellos llegue a la fórmula 1 antes, incluso, que el español.

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